Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

Cuatro insignias de oro y brillantes añadirán aún más emotividad al último derbi de Imanol

Cuatro históricos exjugadores de la Real como Alberto López, Aitor López Rekarte, Agustín Aranzabal y Óscar De Paula, que vistieron en más de 300 ocasiones la zamarra blanquiazul, serán homenajeados en los prolegómenos del partido frente al Athletic.

Aitor López Rekarte, Alberto López y Agustín Aranzabal posan en el estadio de Anoeta.
Aitor López Rekarte, Alberto López y Agustín Aranzabal posan en el estadio de Anoeta. (REAL SOCIEDAD)

El del domingo será un partido muy emotivo en Anoeta. Si ya de por sí enfrentarse al Athletic es algo que motiva especialmente a la parroquia txuri-urdin, en esta ocasión se añaden unas circunstancias especiales que elevarán aún más los grados de este derbi.

Por supuesto están los tres puntos, quizás el último tren de la Real para alcanzar una plaza europea. A ello se suma la circunstancia de que es el primer partido después de que se anunciara la marcha de Imanol, por lo que la grada tendrán la oportunidad de agradecer al de Orio todo lo conseguido durante estos seis años y medio.

Y para rematar el círculo, en los prolegómenos del choque frente a los leones se impondrá la insignia de oro y brillantes a cuatro históricos del club como Alberto, López Rekarte, Aranzabal y De Paula, exjugadores que vistieron en más de 300 ocasiones la zamarra blanquiazul y con los que el club tenía una deuda pendiente.

«Me siento un privilegiado»

En un vídeo publicado en Real Sociedad TV, los cuatro protagonistas han mostrado su orgullo por recibir esta distinción. Sentado en una terraza de su Arrasate natal, López Rekarte destaca que «este es un pueblo muy implicado con el fútbol, van un montón de autobuses para ver a la Real, y el sentimiento es muy grande».

El extremeño Óscar de Paula recuerda que «salir de un pueblo de 10.000 habitantes, sin formación futbolística porque antes los campos eran de tierra, y llegar a la élite es haber cumplido el sueño que uno tenía desde pequeño. Y haber conseguido llegar a la Real Sociedad, haber jugado tantas temporadas, me siento un privilegiado».

En el cénit de esta generación queda la temporada 2002-2003, cuando a las órdenes de Raynald Denoueix pelearon hasta el último día el título liguero frente al Real Madrid. «Recuerdo que en esa pretemporada íbamos sentados en el avión hacia Austria, Karpin, López Rekarte y yo, hablando de cuantos partidos haría falta ganar para ser campeón. Y yo decía que eran veintitantos partidos y que era imposible, pero Valeri, con ese carácter tan competitivo que tiene, decía que por qué no. Y casi lo hacemos», rememora el guardameta irundarra Alberto López.

«Un proyecto a largo plazo»

Sobre el presente, López Rekarte destaca que la Real «es más que un club, tiene a toda Gipuzkoa detrás con un proyecto a largo plazo. Tiene una cantera sólida, con mucha gente trabajando, entrenadores… eso es lo que da sentido a un proyecto así, desde el punto de vista de la personalidad y el sentimiento».

«Es muy bonito estar todos los años en Europa, es una ‘anormalidad’ que ha conseguido Imanol y este grupo de jugadores. Nos han acostumbrado mal, y además jugando muy bien», añade Alberto López.

Agustín Aranzabal remarca que el hecho de que tantos jugadores de la Real jueguen con diferentes selecciones «significa que se hace un muy buen trabajo, hay que aplaudir al club».

Con el reconocimiento del domingo, Aitor López Rekarte cree que «se cerrará un círculo. Estoy muy orgulloso». «Es el premio a un compromiso, a una lealtad, a un esfuerzo, a una renuncia», añade De Paula.

«Lo primero que quieres es entrar en la Real, luego entras y quieres jugar, muchos minutos, muchos partidos, y si ya consigues ser el capitán lo has logrado todo», apunta Aranzabal.

Sobre la tardanza en este reconocimiento, Alberto López señala que «nos había dejado en un cajoncito ahí, pero bien está lo que bien acaba. Estoy tremendamente orgulloso de recibirla».

Para más adelante queda la entrega de esta insignia a otros dos iconos de la Real como el técnico John Benjamin Toshack y el delantero serbio Darko Kovacevic, actos que aún no tienen fecha fijada.