Periodista / Kazetaria

La entente militar Rusia-Corea del Norte llega al ámbito laboral

Rusia está contratando a miles de ingenieros y trabajadores norcoreanos en la región de Kursk y en el área de Vladivostok. La entente se suma al reciente despliegue de miles de soldados del régimen de Pyongyang al frente de guerra contra Ucrania y preocupa a Seúl, Tokio y Washington.

Norcoreanos reciben con banderas rusas al presidente de la Duma (Parlamento de Moscú) a su llegada a Pyongyang.
Norcoreanos reciben con banderas rusas al presidente de la Duma (Parlamento de Moscú) a su llegada a Pyongyang. (KIM WON JIN | AFP)

Rusia y Corea del Norte están negociando el envío de de trabajadores, especialmente ingenieros y técnicos, a regiones como Kursk y Vladivostok, así como el intercambio de tecnología y formación técnica, según medios surcoreanos. Ambos países están intensificando su cooperación en los ámbitos tecnológico, militar y laboral, en una estrategia que va mucho más allá de evadir sanciones económicas y afecta a los equilibrios internacionales.

El Ministerio para el Desarrollo del Lejano Oriente y el Ártico de Rusia, junto con los ministerios de Asuntos Exteriores y Defensa, lideran las conversaciones con Corea del Norte para coordinar este envío. «Las dos partes ya están trabajando en los detalles a nivel operativo», afirmó una fuente rusa consultada por el medio Daily NK, que añadió que se prevé la llegada de miles de trabajadores norcoreanos en los próximos meses, principalmente para labores de reconstrucción en Kursk, aunque también en la región de Vladivostok, en el extremo oriental de Rusia.

MANO DE OBRA BARATA

El Kremlin considera a los trabajadores norcoreanos como mano de obra barata y fácil de gestionar, lo que abre la puerta a que participen la construcción, infraestructuras industriales de comunicaciones y de energía. Además, se prevé que Corea del Norte envíe oficiales militares e ingenieros para recibir formación técnica de largo plazo en Rusia, incluyendo a estudiantes y científicos. Este intercambio permitiría a Rusia acceder a mano de obra técnica asequible y a Corea del Norte modernizar su fuerza laboral, mejorando sus capacidades tecnológicas.

Ante las restricciones financieras impuestas por las sanciones internacionales, ambos países están considerando modificar los métodos de pago por el envío de trabajadores. «Están evaluando la opción de sustituir los pagos en efectivo por compensaciones en especie, lo que les permitiría esquivar las sanciones y maximizar los beneficios para ambas partes» explicó la fuente rusa consultada.

El comercio bilateral ha experimentado un notable crecimiento en los últimos meses. Aleksandr Matsegora, embajador ruso en Corea del Norte, destacó en marzo que el comercio bilateral se ha expandido rápidamente tras la firma del tratado de asociación estratégica integral.

Frente a las sanciones occidentales, Rusia apuesta por consolidar a Corea del Norte como socio diplomático clave, mientras que Pyongyang ve en esta alianza una oportunidad para romper su aislamiento militar y económico. Esta cooperación trasciende y podría afectar la aplicación de las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que prohíben totalmente la transferencia de armas, tecnología y mano de obra norcoreana, así como el equilibrio de seguridad internacional.

OPOSICIÓN Y TOTAL RECHAZO

Corea del Norte ya ha enviado tropas de combate y municiones para respaldar el esfuerzo bélico ruso en Ucrania. El NIS surcoreano estima que, desde el año pasado, Pyongyang ha desplegado entre 10.000 y 12,000 soldados en Rusia, con al menos 3.000-4.000 adicionales enviados este año. A cambio, Rusia habría proporcionado a Corea del Norte asistencia militar y económica, incluyendo sistemas de defensa aérea, equipos de interferencia electrónica y tecnología para motores de cohetes espaciales, drones y sistemas de guiado de misiles.

Siempre según fuentes de inteligencia de occidentales, Corea del Norte habría enviado entre 25.000 y 30.000 efectivos adicionales, lo que elevaría el contingente norcoreano en Rusia a más de 40.000 militares, aunque no existen datos verificables de forma independiente. Las tropas norcoreanas, muchas de ellas jóvenes y con limitada experiencia en combate, recibieron entrenamiento en el este de Rusia antes de ser trasladadas a la frontera con Ucrania. Fuentes occidentales estiman que alrededor de 4.000 han muerto o han resultado heridos desde el inicio de su despliegue.

Estas acciones han generado preocupación no solo en Ucrania, también en Seúl, Tokio, Washington y Kiev, ante la posibilidad de que Rusia transfiera tecnología sensible que podría fortalecer el programa nuclear norcoreano, desestabilizando aún más la seguridad regional y global. En este contexto, la evolución de la cooperación entre Moscú y Pyongyang es observada de cerca tanto en Occidente como en Asia, donde gobiernos y analistas se muestran preocupados por los próximos pasos de ambos países y el impacto potencial que puedan tener en la dinámica regional e internacional.