Los empleados de la empresa Enviser, subcontratada por el Ayuntamiento de Gasteiz para el mantenimiento de parques, jardines y otros espacios verdes de la ciudad, comenzaron el 26 de marzo una huelga en demanda de mejoras de sus condiciones laborales y salariales.

El pasado martes se celebró la última reunión en el Preco, donde los sindicatos presentaron una nueva oferta y la empresa no se cerró ante la misma, por lo que los trabajadores son ahora un poco más optimistas. Este jueves habrá otra reunión, también en el Preco, y el comité espera la respuesta de Enviser.

Si no hay pacto mañana, seguirían las negociaciones, aunque en una rueda de prensa celebrada hoy también han advertido de que se plantean comenzar una huelga de hambre con una acampada en las escalinatas de la Catedral nueva.

«Tenemos la determinación de continuar la lucha. Por lo que, en caso de no alcanzar un acuerdo satisfactorio en un corto periodo de tiempo, estamos preparadas y preparados para pasar a una nueva fase en la lucha por mejorar nuestras condiciones laborales, en la que anunciamos que se dará inicio a una huelga de hambre en la que se pondrá toda la energía necesaria para lograr nuestros objetivos», han manifestado.

«Esperamos no tener que llegar a ese extremo, ahora la pelota está en los tejados del Ayuntamiento y de la empresa», han añadido los representantes de los trabajadores, que han recordado que en los últimos años la plantilla ha sufrido una pérdida de su poder adquisitivo superior al 13%, con unos salarios que ya de por sí son «muy bajos», lo que ha provocado que sus retribuciones queden cerca de la cuantía del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).