Osasuna empata con el Rayo y va camino del trimestre sin conocer la victoria (1-1)
Osasuna sigue sin engancharse al triunfo liguero, algo que ya va camino del trimestre sin conseguirlo. En esta ocasión, la escuadra navarra ha tenido que rescatar un punto gracias a un gol de Raúl García (m.60) para contrarrestar el que ha marcado Camello en el primer tiempo (m.19).
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Osasuna sigue reñido con la victoria y ya se encamina hacia el trimestre sin conseguir un triunfo liguero. Una vez más, no ha podido pasar del empate ante un Rayo Vallecano que le ha puesto las cosas muy complicadas.
De hecho, se ha adelantado en el primer tiempo, lo que ha obligado a los anfitriones tras el descanso a salir con todo para, al menos, rescatar un punto, como así ha ocurrido finalmente.
Así, un gran movimiento ofensivo de Camello ganándole la espalda a Catena con posterior picada sobre Sergio Herrera tras envío medido de Ratiu (m.19) ha marcado una primera parte en la que la escuadra navarra ha dispuesto de un dominio estéril, con escaso colmillo sobre la portería defendida por Batalla.
De hecho, quitando un toquecito por detrás de Mumim al central rojillo que ni el trencilla ni el VAR quisieron considerar como penalti (m.4) y un remate defectuoso del propio Catena (m.41) ha sido de lo poco que se ha podido contabilizar en el haber de los anfitriones.
Demasiado previsibles, los de Vicente Moreno han intentado buscar las bandas, sobre todo por el costado de Areso, pero los posteriores centros no han gozado de la calidad y precisión suficientes como para que los delanteros tuviesen ventaja a la hora de rematar.
En cambio, los visitantes sí que han sabido aprovecharse de los huecos dejados por los rojillos, firmando transiciones muy peligrosas que han podido sangrar todavía más a los locales y prácticamente todas ellas han llegado por el costado diestro franjirrojo.
Otra nueva internada de De Frutos (m.32) ha sido abortada por la rápida reacción de Juan Cruz, que ha taponado su disparo, y de nuevo el futbolista segoviano ha iniciado una jugada de tiralineas que no ha sabido entender Embarba (m.43).
Ya en el descuento de este primer periodo, el Rayo ha vuelto a meter el miedo en el cuerpo a la grada. Ratiu, que ha firmado 45 minutos de gran calidad, se ha marchado de todo el mundo, pero su servicio no ha encontrado un rematador claro.
Raúl recupera el olfato de gol
Al descanso, Vicente Moreno ha movido banquillo, buscando más profundidad por banda y mayor presencia ofensiva, con la entrada de Bretones y Raúl. A las primeras de cambio, el asturiano ya ha sido consciente de la pareja con la que tenía que lidiar, al marchársele De Frutos y solo evitar la manopla de Herrera el 0-2 (m.46).
Pese a ello, la dinámica claramente ha variado, con un Osasuna apretando a su adversario y encerrándolo en su campo. Un trallazo de Moncayola (m.53) ha puesto de manifiesto ese hecho, al que ha respondido una parada con apuros de Batalla, en la primera gran ocasión de los anfitriones.
En la siguiente ya no han fallado. Una jugada trenzada desde propia área, sacando Boyomo, abriendo de primeras Moncayola al incansable Areso y este cediendo a Rubén García para poner con la derecha un centro medido al testarazo inapelable de Raúl García (m.60).
El empate ha traído un envite de ida y vuelta, sin descanso, con ocasiones por ambos lados. Los rojillos han podido volver a golpear con otro balón aéreo, pero entre Catena y Budimir se han molestado para que el croata no pudiese embocar su cabezazo entre los tres palos, cuando la grada ya se relamía con el 2-1 (m.66).
Isi ha puesto la réplica, intentando sorprender a Herrera (m.67) desde la lejanía, pero las yemas de los dedos del cancerbero burgalés y el travesaño han impedido que el golazo subiese al marcador.
De hecho, el bloque vallecano también ha despertado para el último cuarto de hora, no conformándose con el empate y metiendo en problemas a un Osasuna bastante partido en su intento por volver a firmar la tan ansiada victoria.
Finalmente, ninguno de los acercamientos que han llegado por uno y otro bando han acabado fructificando en nada serio, acabando el choque en un reparto de puntos, que ha parecido lo más justo a tenor de lo visto sobre el césped.