Michele Kang: su relación con el fútbol femenino «no es caridad, es un buen negocio»
Michele Kang, dueña de Washington Spirit, OL Lyoness y London City Lionesses, que acaba de ascender a la WSL, es la mujer más poderosa del fútbol femenino. Ahora también toma las riendas del Olympique de Lyon para intentar salvarlo.
Para leer este artículo
regístrate gratis o suscríbete
¿Ya estás registrado o suscrito? Iniciar sesión
Se te han agotado los clicks
¿Cartera o kang-tera? No es una errata, no. Es que el ámbito de los tópicos debe ser uno de los pocos que le quede por conquistar a Michele Kang en el mundo del fútbol femenino. Y ojo con el masculino porque desde hace una semana preside el Olympique de Lyon y ya ha conseguido evitar el descenso administrativo del equipo francés.
Yongmee Michele Kang nació en Corea del Sur hace 66 años. Estudió Administración de empresas en su país y después se marchó a Estados Unidos a completar sus estudios en las universidades de Chicago y Yale. Allí se quedó –tiene nacionalidad estadounidense–, amasó su fortuna, más de mil millones de euros según 'Forbes', y se interesó por el fútbol femenino, sobre todo a raíz de la victoria de Estados Unidos en el Mundial de 2019.
Cuando vendió su empresa por una cifra astronómica tuvo claro a dónde mirar. Empezó adquiriendo un paquete de acciones del Washington Spirit y cinco años más tarde es la dueña de la franquicia, una de las mejores de la NWSL, del campeonísimo francés Olympique de Lyon (u OL Lyonnes, su nueva denominación) y de London City Lionesses, que acaba de ascender a la WSL, donde la próxima temporada será el único club independiente. Y ya hay rumores sobre su interés en la Liga F y el fútbol sudamericano.
Solo en la Eurocopa que se disputa este mes en Inglaterra, hay 16 futbolistas que juegan en alguno de sus equipos, incluyendo a Damaris Egurrola y a su última incorporación para el London City Lionesses, la exjugadora de la Real Sanni Franssi. Con las internacionales en selecciones de otros continentes podrían completarse un par de convocatorias. Kang quiere ganarlo todo y no duda en dedicar recursos a su objetivo. Se llevó a Jonathan Giráldez a Washington tras su éxito con el Barcelona y ahora lo ha 'traspasado' a Lyon , para buscar la Champions League que se le resiste, fichó a Markel Zubizarreta, ingeniero del Barcelona campeón, ha desmantelado la delantera del PSG para reforzar la del OL Lyoness, convenció a Saki Kumagai, que defendía título en Italia con la Roma para irse a la Segunda División inglesa con London City Lionesses, donde ya estaban Asllani y Jakobsson...
Pero el imperio de Kang no es una simple, es un decir, multipropiedad. Hace apenas un año anunciaba el nacimiento de Kynisca –Cynisca de Esparta fue la primera mujer en ganar una prueba en los Juegos Olímpicos–, una empresa que unificaba sus propiedades, en la que invertía 50 millones con la pretensión de captar otro tanto y que incluía un hub de innovación, dedicado a la investigación científica enfocada al deporte femeninos. Este mismo año, ha anunciado la integración de Kynisca Innovation Hub en la Federación de Estados Unidos, con una inversión incluida de 22 millones de euros y que se unen a la donación de 25 millones de euros a cinco años anunciada unos meses antes para el desarrollo de programas dedicados principalmente al fútbol base. La Federación de rugby también se ha llevado 3,5 millones, destinados a la preparación de los Juegos de 2028 y la promoción del rugby femenino.
Es una filántropa y ha mostrado en muchas ocasiones su deseo de impulsar el deporte femenino pero también deja claro que su relación con el fútbol femenino «no es caridad, es un buen negocio». A futuro pero también a presente. Hace dos años completó la compra de Washinton Spirit por 28 millones de euros y hoy se estima su valor en unos 110. Los ingresos de la franquicia se han triplicado y la asistencia a sus partidos también. «Mi misión es demostrar que esto no solo es un negocio sino un buen negocio». Lo cierto es que su guante lo han recogido fondos y millonarios y la inversión en deporte femenino en general y en fútbol en particular –Mercury 13 compró el Como , Alexis Ohanian ha entrado en el accionariado del Chelsea...– está creciendo de forma exponencial. Otra cosa es que las formas sean las correctas, sobre todo en el caso de las multipropiedades.
Olympique
El peligro de estas ha quedado claro en un caso estrechamente relacionado con la propia Kang, con el lío que ha desangrado al Olympique de Lyon y ha estado a punto de costarle el descenso administrativo, evitado in extremis ayer mismo.
Propietario ya del Botafogo brasileño y del Molenbeek belga, y accionista del Crystal Palace, John Textor se convirtió en 2023 en accionista mayoritario del Olympique. Para salvarlo, en teoría, aunque ha acabado de hundirlo. Y no han ayudado las operaciones dudosas entre clubes de su propiedad.
Hace una semana, ante la gravedad de la situación, Textor fue destituido, dejando su puesto a Kang, tercera accionista del club tras la compleja operación que le llevó a adquirir la sección femenina de manera independiente. Ahora, junto al ex del Bayern Michael Gerlinger, muy respetado en el fútbol continental, toma las riendas del club. De momento ya han evitado el descenso y ponen en marcha un plan de saneamiento para reflotar la entidad. El fútbol masculino también se convierte en «terreno Kang».