@MartxeloDiaz
IRUÑEA

Artieda defenderá el derecho a poder vivir en aragonés

Mientras Iruñea albergue el día 2 de junio una manifestación contra la normalización del euskara, la localidad de Artieda d’Aragon, situada a 74 kilómetros de la capital navarra, acogerá la octava edición de la Trobada (Encuentro) Vivir en Aragonés que reclamará el derecho a la supervivencia de esta lengua gravemente amenazada.

Cartel en Artieda que reclama «Todavía estamos vivos y en lucha. Yesa no». (Idoia ZABALETA/FOKU)
Cartel en Artieda que reclama «Todavía estamos vivos y en lucha. Yesa no». (Idoia ZABALETA/FOKU)

«Las décadas de lucha contra el recrecimiento de Yesa, y la conciencia generada después de ver las pérdidas que nos dejó el actual pantano, que provocó la marcha de vecinos de nuestra comarca nos ha hecho amar muchísimo nuestro patrimonio, nuestra cultura, nuestras tradiciones y nuestra raíces. Yesa dejó vacíos y llenos de sombras los pueblos de Tiermas, Ruesta y Escó, nosotros no queremos que Artieda siga por el misma rumbo», destaca el alcalde de Artieda, Lois Solana, en la presentación de la Trobada, que tendrá lugar del 1 al 3 de junio.

En esta localidad de la Chacetania, se puso en marcha el proyecto Empenta (Impulsa) Artieda, que busca frenar la despoblación que sufren los pueblos del Pirineo. Entre las iniciativas que desarrolla se encuentra los cursos de aragonés. «Es una lengua que en Artieda no se queda en bonitas palabras o expresiones. Estamos orgullosos de escuchar cómo se habla en la vida cotidiana, en las calles o en la Tabierna (taberna). Es para nosotros bien bonito que estos días el aragonés llene nuestro pueblo», añade el alcalde.

«Claro que se puede vivir en aragonés. Hay mucha gente que lo hace cada día en sus diferentes variantes como lengua materna: cheso, ansotano, tensino, pandicuto, chistabín, benasqués, ribagorzano, belsetán... Y cada vez hay más gente que, aunque el aragonés no sea su lengua materna, lo siente como si lo fuese y quiere vivir en esta bonita lengua», destacan los organizadores de la Trobada.

El objetivo de la Trobada es «juntar a fablans (hablantes) para que se conozcan, hablen, jueguen, simpaticen y compartan un fin de semana lleno de actividades, enseñando que es posible vivir en esta lengua fuera de los pequeños círculos familiares y sociales a los que estamos acostumbrados». No en vano, el aragonés está considerado por la Unesco como una lengua en serio peligro de extinción. Por ello, extender su uso es esencial para garantizar su superviviencia.

Entre las actividades que se han organizado, todas gratuitas y en aragonés, se encuentran talleres culturales y lingüísticos, espectáculos de magia, exposciones, conciertos, excursiones, campeonatos de frontón y de escalada. Las comidas y las cenas se prepararán con productos aragoneses.