Según informa el Consistorio a través de una nota, Policía Municipal está investigando de oficio lo ocurrido tras el cierre de un local de hostelería la noche del viernes al sábado cuando el dueño del local fue agredido, presuntamente, por varias personas relacionadas con quienes ocupan estos inmuebles.

Posteriormente, en la noche del sábado, se produjo una concentración vecinal en la que se acusaba del incidente a esas personas. Ante la tensión creada, Policía Municipal realizó «una intervención preventiva y tendente a impedir enfrentamientos físicos entre los concentrados y las personas que residían de forma ilegal en los inmuebles de titularidad municipal situados en el número 13 de la calle Jarauta», añade la nota del Ayuntamiento.

Policía Municipal actuó «para garantizar la seguridad tratando de calmar los ánimos y evitando situaciones de riesgo», continúa. El dispositivo se mantuvo durante toda la noche y la mañana del domingo.

El Consistorio iruindarra denunció a principios de año que en el citado inmueble, concretamente en cuatro pisos de titularidad municipal, residían algunas personas de forma irregular. En enero se abrió un proceso judicial para recuperar su uso pleno por parte del Ayuntamiento. El destino futuro de estos pisos es su rehabilitación para dedicarlos a realojos de vecindario de Alde Zaharra inmerso, a su vez, en procesos de rehabilitación de sus propias viviendas.