La anulación oficial de fiestas de Baiona no ha impedido que, al calor de la desescalada, se haya prodigado los comentarios, en redes y también a pie de calle sobre la posibilidad de recuperar de alguna manera los festejos previstos antes de que se desatara la pandemia.

El presidente de la agrupación de peñas baionarras, Owen Lagadec-Iriarte, asegura que «el deseo de reencontrarse en unas fiestas improvisadas es comprensible», pero remarca que nada ha cambiado en la decisión inicial adoptada en coordinación con el Ayuntamiento.

La asociación celebró una reunión anoche y hoy ha difundido un comunicado en el que «las peñas de Baiona reafirman de manera clara y sin ambigüedad que respetan y apoyan la decisión adoptada por las autoridades de suspender los festejos» en razón de la pandemia.

Con la misma claridad señalan que las peñas no organizarán «ningún acto público susceptible de dar lugar a unas fiestas espontáneas o informales».

En todo caso, las peñas alertan a las autoridades municipales sobre el hecho de que «algunos baionarras y también gentes de fuera de la ciudad están convencidos de que habrá finalmente alguna celebración» y consideran que «es necesario que se valoren medidas preventivas» que las peñas secundarían «siempre y cuando se respete la libertad de las personas de moverse libremente, y de frecuentar, si lo desean, los bares o los restaurantes».

Las peñas se declaran así dispuestas a abordar esa reflexión con los responsables municipales, pero recordando que siguen vigentes los motivos que llevaron a suspender las fiestas.

«Dada la fragilidad de la situación sanitaria, una reunión masiva de personas en un contexto festivo masivo como el de fiestas de Baiona no es razonable», recuerdan las peñas para reafirmar el mensaje de que «este año no habrá fiestas, pero emplazamos a toda la ciudadanía a las fiestas de 2021 que serán, si cabe, más hermosas».