La Prefectura de Pirineos Atlánticos ha vuelto a reafirmarse este jueves en la orden de portar mascarilla en las calles y horarios que congregan a más número de personas en un total de 9 localidades del norte de Euskal Herria.

Se trata de los municipios de Angelu, Baiona, Biarritz, Donibane Lohizune, Bidarte, Ziburu, Ezpeleta, Getaria y Donibane Garazi.

La delegación estatal ya había tomado esa decisión con fecha de 20 de agosto, dando cobertura a decisiones ya adoptadas de forma precedente por los propios municipios vascos.

Algunos ayuntamientos, casos del de Baiona y el de Biarritz, establecieron sus propios perímetros en el callejero local, y otros, como los de Ziburu o Angelu se inclinaron por solicitar el uso de la máscara en los mercados.

Sin embargo el 2 de setiembre el Tribunal Administrativo de Pau dejó en el alero esas prescripciones, a la espera de conocer una opinión al respecto de la Agencia Regional de Salud (ARS) de Nueva Aquitania.

Hoy esa institución sanitaria ha aportado un informe que confirma «la evolución preocupante de la situación pandémica» en el departamento del que forma parte Euskal Herria.

De hecho, según recuerda el informe conocido hoy, en el Departamento de Pirineos Atlánticos se registraba una tasa de incidencia del covid-19 de 2,7 por 100.000 habitantes a primero de agosto. Mientras, el 28 de mismo mes el ratio ascendía a 37,9 sobre 100.000 habitantes.

A la luz de ese informe sanitario, la prefectura restablece ahora la obligatoriedad de la máscara, y reitera que las personas que no la porten arriegan una sanción de 135 euros o más en caso de reincidencia.

Brote importado en Larresoro

Hoy ha trascendido que siete miembros del comité de fiestas de Larresoro han sido infectados de covid-19 a raíz de participar en una celebración en Arcachon (Landas).

Dos casos de coronavirus han sido detectados además en el servicio geriátrico Trikaldi de Donibane Lohizune.