Gotzone Sagardui, nueva consejera de Salud de la CAV, comparece este lunes en el Parlamento para explicar los planes de su departamento, como está haciendo el resto de miembros del Gobierno. Pero esta sesión es especial: lo hace en un contexto totamente marcado por la mala evolución de la pandemia estas últimas semanas. Algo que ha atribuido a que «no hemos sido capaces de convivir con el virus, nos hemos relajado».

Ha señalado a la población por escudarse en impresiones como «en mi pueblo no hay covid, en mi familia no hay covid, en mi entorno no hay covid...». A ello «se le ha sumado el cambio de estación», que ha provocado que los encuentros pasen a «sitios cerrados y poco ventilados».

«No nos ha pasado solo a nosotros. Esta nueva ola nos ha igualado a todos y todas. Ahora se nos evaluará en función de la decisión con que tomemos medidas», ha seguido Sagardui.

Ninguna autocrítica en su intervención. Ha considerado adecuadas las medidas adoptadas por el Gobierno Urkullu, antes y ahora, con más seguridad jurídica al amparo del estado de alarma. No ha dado pistas sobre próximos pasos, más allá de apuntar que «la tendencia sigue aumentando, tenemos que mantener la tensión».

En esta ausencia de autocrítica, la consejera ha puesto en valor los recursos implantados. En primer lugar ha dicho que en la CAV se han realizado ya un millón de test y «hemos rastreado a una cuarta parte de la población» de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

La falta de rastreadores en los momentos iniciales ha sido señalada por muchos expertos, pero la consejera ha preferido destacar que «tenemos más de 600 personas colaborando en los rastreos».

Sobre la suficiencia o no de la plantilla de Osakidetza, que ha dado pie a numerosas protestas y en este momento a una huelga que se está desarrollado por herrialdes, Gotzone Sagardui ha reivindicado que «la nómina de Osakidetza ha aumentado en más de 3.000 personas, un 8% más», en este último año.

Junto a todo ello ha puesto sobre la mesa el gasto ya realizado por esta Administración a causa de la pandemia: 338 millones en total según sus datos, de los que 83 corresponden a costes laborales, 82 a la atención hospitalaria, 24 a inversiones...

«Reforzar la red de vigilancia», a futuro

Además de ello, la consejera ha presentado el Marco Estratégico del Departamento de Salud 2021-2024 que contempla el desarrollo del nuevo Plan de Salud que abarque hasta el año 2028, el desarrollo de una nueva Ley de Salud Pública o la creación de un Comité Epidemiológico permanente en la CAV que «garantizará que las actuaciones en Salud Pública estén alineadas con las estrategias europeas en esta materia».

«Para mejorar las capacidades del sistema vasco de salud ante situaciones de nuevos brotes, resulta fundamental la introducción de nuevos test diagnósticos y mantener y reforzar la red de vigilancia y control de casos de acuerdo con la evolución de las tasas de incidencia», ha defendido.

En materia de vacunación, ha avanzado que «además de gestionar y adaptar a nuestra realidad las nuevas vacunas para frenar el coronavirus, el objetivo del departamento evaluar, actualizar, y si la situación epidemiológica lo requiere, ampliar los calendarios de vacunación infantil y de adultos, así como los criterios para los programas de vacunación en grupos de riesgo».

En materia de consolidación del empleo y condiciones, ha informado de que «se renovará y aumentará la plantilla aportando así estabilidad laboral a Osakidetza, mediante la convocatoria de 4.000 plazas en el periodo 2020-2024, aplicando los nuevos modelos de selección y promoción profesional aprobados en el Parlamento Vasco».

«Junto a los profesionales, se revisará el acuerdo de condiciones laborales y se implantarán nuevas medidas de conciliación familiar y personal, así como un sistema de movilidad abierto y programas de conciliación corresponsable del personal sanitario con medidas de flexibilidad horaria y teletrabajo», ha señalado.

Sagardui ha avanzado que se incrementará la plantilla en Atención Primaria con nuevas plazas de personal facultativo y de enfermería con el objetivo de «mejorar la atención de la población en el seguimiento de su estado de salud, así como en la identificación de posibles nuevas enfermedades como el coronavirus, su rastreo, seguimiento y control». Además, ha dicho que se priorizará la formación MIR en pediatría y MIR y EIR en familia-comunitaria.