A mi familia siempre nos han gustado mucho los bichos (de todo tipo, no solo las mascotas). A mi madre, además de encantarle los animales, resulta que también le gustaba la decoración y tenía dos hijos a su cargo, así que de tener un perro en casa, no quería ni oír hablar y la gata que dormía acurrucada en mis pies terminó viviendo con mi abuela al cabo de un año. Por lo tanto, lo máximo a lo que pudimos aspirar fue a tener peces de colores: uno negro de ojos saltones y otro naranja que creció, creció y creció, y un día apareció en el plato (que no, que es broma, eso solo pasaba con los pollitos de colores). El caso es que mi yo adolescente amaba a mis peces de colores y ellos me amaban a mí, porque me decían «Te quiero» con su boquita. Todo era armonía entre nosotros y el drama surgía cuando había que cambiar el agua de la pecera. “Avo” es una elegante y moderna pecera diseñada por la empresa inglesa Noux que contiene un filtro natural que recupera el amoniaco de las heces de los peces y lo transforma en nitrato que alimenta las plantas acuáticas entre las que nadan los pececitos. Estas, a su vez, generan oxígeno y mantienen el agua limpia y cristalina. Di adiós a la caza casera del pez y a los peces estresados que terminan saltando a la baldosa de la cocina. https://noux.co.uk/

Adam

Primero nos emocionamos con las bicis plegables, luego con las de madera o bambú, después caímos rendidos ante las eléctricas y ahora llegan las e-bikes, un nuevo concepto de funcionalidad que combina transporte y ahorro energético. Diseñada por el estudio holandés Springtime, “Adam” no es solo una bicicleta de aspecto moderno que nos permite desplazarnos de un lugar a otro, sino que su concepción va más allá. «La idea de partida no era hacer otra bici eléctrica más, sino integrar los dos conceptos, de forma que consiguiéramos aprovechar la electricidad que producimos al usarla», comentan sus creadores. Como el resto de bicis eléctricas, cuenta con un motor que nos ayuda a desplazarnos, pero la diferencia radica en que la batería de “Adam” es extraíble, lo que también nos permite emplearla como batería en la que conectar todo tipo de dispositivos, como el teléfono móvil para utilizarlo como GPS. Y hasta cuenta con unos altavoces que lleva incorporados para pedalear y llevar la música contigo a cualquier parte. Aunque en principio fue pensada para estudiantes, lo cierto es que el resultado final es extrapolable a casi cualquier persona. http://springtime.amsterdam/

Mobi

El diseñador James Dieter celebra el lanzamiento de su nuevo estudio con “Mobi”. Aunque Dieter no es nuevo en esto del diseño de lámparas (lleva colaborando con dform desde 2001), en esta nueva etapa, el neoyorquino quiere centrarse en la exploración y conexión de formas geométricas. “Mobi” se encuentra a medio camino entre una lámpara y una escultura, ya que, gracias a su cuerpo mutable, puede transformarse en una amplísima variedad de formas y tamaños. Su característico diseño nos permite remover la fijación de los puntos de los que también se suspende y cambiar su apariencia a nuestro gusto. Disponible en dos acabados, aluminio y cobre, incluye una pequeña hoja de instrucciones para animarnos a crear diferentes figuras. http://jamesdieter.co/

Lander

Influenciada por el trabajo de los Eames y Noguchi, “Lander” es una mesita minimalista que combina lo esencial de la geometría con la economía en el diseño. Hecha a mano por artesanos de Chicago, en su realización se ha empleado una liviana hoja de acero plegada que puede ser desmontada fácilmente. Tres patas triangulares se insertan en los costados de la superficie hexagonal y le aportan estabilidad al conjunto gracias a unos pequeños clips que las sujetan entre sí. La mesa está disponible en blanco, verde menta y azul cielo, colores tradicionalmente asociados a la época de los años 50 en la que está inspirada. http://parsonscharlesworth.com/

Pendientes

La diseñadora italiana Cristina Celestino se inspira en los pendientes para crear “Bon Ton”, una línea de lámparas colgantes que, al igual que estos accesorios, juega con la combinación de elementos enhebrados. «Los pendientes pueden estar hechos de infinitos materiales, por lo que, para crear Bon Ton, me he inspirado en esa idea», señala. La italiana emplea volúmenes y color para crear pequeñas microarquitecturas en forma de piezas colgantes y para acabar las distintas composiciones. Y a modo de guiño, «todas las lámparas se cierran con una pieza de latón en forma de mariposa». www.designattico.com