En estos días vemos cómo se suceden distintas actividades que anuncian el final de un ciclo. Quizá sea el principio del final de curso; o quizá se trate de la intuición del horizonte estival; o de la apremiante necesidad de pasar página para abrir nuevas expectativas. Toca, en fin, presentar los resultados y por ello, la Panoramika de hoy tiene un marcado carácter joven y emergente, aunque estas categorías nunca han estado muy claras cuando se abordan desde el territorio de las artes.

Hasta el 5 de julio puede verse en la Sala Rekalde la muestra itinerante de artes visuales “Ertibil Bizkaia 2015”, que luego recorrerá distintos municipios del territorio histórico. “Ertibil” inició su andadura en 1983 con el objetivo de apoyar y promocionar a los artistas emergentes. En esta edición, las artistas galardonadas han sido Andere Etxegarai, Cristian Villavicencio y Amaia Molinet. Etxegarai ha recibido el primer premio gracias a la creación audiovisual “Controversia”, un emotivo vídeo de cinco minutos que pertenece a un proyecto más amplio sobre la relaciones humanas, sobre la comunicación y el autismo. Pero probablemente, tan interesante como la obra galardonada sea la narración que hace la propia autora de cómo tuvo lugar la comunicación del premio y su posterior reflexión sobre la relatividad del éxito y del fracaso en la práctica artística; un recomendable testimonio que puede encontrarse en la red. Cristian Villavicencio, en la línea de sus últimos trabajos, presenta un artefacto que pone en tensión las formas escultóricas con los dispositivos tecnológicos de la imagen, provocando una especie de zozobra entre lo reconocible y lo indeterminado. El trabajo de Amaia Molinet parte de la fotografía para buscar nuevas formas de relación con el contexto. El espacio natural o la arquitectura son en este caso su ámbito de experimentación.

También en la Sala Rekalde encontramos el trabajo de Juana García Pozuelo, incluida esta en el programa “Barriek 2015”, que muestra los trabajos de artistas becados por la Diputación. Se trata de una serie de cuadros que combinan figura y paisaje mediante diferentes alegorías, y en donde la referencia onírica es la encargada de encontrar el argumento y la trama.

Entre los días 8 y 20 de este mes de junio tendrá lugar la quinta edición de “Arteshop”, una iniciativa de la facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco en la que participan el Ayuntamiento de Bilbo y la Fundación BilbaoArte. Más de setenta estudiantes de arte llevan sus propuestas hasta los comercios de la ciudad, propiciando una extensa exposición colectiva que busca fórmulas dignas de interrelación. Los escaparates y los interiores de estos locales se convierten así en pequeñas galerías, pero también en una interesante “zona de pruebas” para este joven plantel de artistas. Existe una completa página web que informa de los locales, así como de las y los autores seleccionados para esta experiencia, además de rutas temáticas.

“Foodlandia” es la exposición que presentan Rut Briones y Raquel Durán en BilbaoArte hasta el próximo día 26, una exploración audiovisual de nuestra relación con la comida. Los cinco segmentos visuales que articulan la muestra parten de una pregunta nada baladí: ¿Somos lo que comemos o nos come lo que somos?