El verano está dando duro en lo que a temperaturas se refiere, lo que está favoreciendo el baño y el disfrute de la playa en cualquier punto de Europa, como se aprecia en estas imágenes aéreas que corresponden a los Países Bajos y a la isla de Ruegen, en el mar Báltico. La ventaja de un punto de vista tan elevado es que nos muestra claramente cómo, en el ámbito del baño, no solo puede variar el estilo con el que chapoteemos en el agua, sino que hasta el continente puede tener su forma particular. Así, nos encontramos con un parque recreativo de Utrech con contornos de pieza de puzzle o con la piscina que representa un reloj en la localidad de Baarn.

Pero esos dibujos sobre la arena también pueden ser más provisionales, como las filas perfectamente alineadas que forman las sombrillas y las hamacas en la localidad alemana de Binz o en la holandesa playa de Scheveningen, como se aprecia sobre estas líneas.