Ir pertrechado por unas buenas botas de agua, no tener miedo a las multitudes (180.000 asistentes) y, sobre todo, disfrutar con las actuaciones de las primeras espadas de la música... aunque haya quienes luego presuman de no haber visto actuación alguna. Estaban a otras cosas. Estas son las premisas para acudir al Glastonbury Festival of Contemporary Performing Arts, más conocido como Glastonbury o Glasto, la «madre de todos los festivales» que se celebra en Plinton (Somerset, Inglaterra). Las fotos corresponden a su edición pasada (del 22 a 26 de junio), la más lluviosa y llena de barro de los 45 años de vida de festival. Su fundador, Michael Eavis, lo achaca al calentamiento global.