TERESA MOLERES
SORBURUA

Trabajos para hoy

Esta es la época del año con mil trabajos a realizar: colocar las rejillas para los rosales trepadores; limpiar los setos invadidos por hiedras; cortar los bambús; dividir los agapantos; plantar fresas; comenzar la lucha contra limacos y caracoles; y proteger los frutales de las plagas colocando trampas de feromonas y sembrar hierba a sus pies para reducir su vegetación.

Además también es preciso sembrar flores anuales y poner al día los bulbos que florecerán en verano: canas, begonias y dalias, sin olvidar capuchinas e ipomeas. Debemos colocar los tiestos con las semillas de las plantas frioleras cerca de una ventana y, en cuanto comiencen a brotar, plantarlas en su lugar definitivo al sol. Con las ipomeas podemos conseguir rápidamente una cortina de flores del blanco al azul pasando por rojas y púrpuras. Las rejillas del emparrado se instalan antes de la siembra.

Las semillas de plantas protegidas con una capa coriácea como nueces, mimosas, arbustos de la sabana africana, lupinos e hibiscos, solo germinan cuando la lluvia les ha empapado durante mucho tiempo, por lo que antes de plantarlas es conveniente engañarlas poniéndolas a remojo durante una hora en agua muy caliente a 70 grados, por ejemplo, en un termo. Con los bulbos de dalias y begonias se puede ganar tiempo con el mismo sistema, dejarlas que se hinchen en agua durante algunas horas

Como prevención para evitar enfermedades y parásitos, es necesario lavar con agua y lejía los tiestos y jardineras a reutilizar, las herramientas pequeñas y las estanterías con tiestos. Después, aclararlos bien. Y por último, y no menos importante, solo utilizar tierra nueva al cambiar los tiestos.

Con los luminosos días de primavera las plantas de interior también necesitan una sacudida vivificante. Hay que verificar que no tengan parásitos, cortar todas las partes marchitas o desgalichadas y extraer partes para nueva plantación. También es un buen momento para comenzar los aportes de fertilizantes sobre todas las plantas. A las plantas que observemos fatigadas les irá bien refrescarlas con tierra nueva en la superficie. Para ello, primero debemos rascar la tierra de la superficie, tirarla y remplazarla con tierra nueva mezclada con abono especial para plantas de interior.