ARTURO F. RODRIGUEZ
PANORAMIKA

Belleza

En “El abuso de la belleza” (2005), Arthur C. Danto (Michigan, 1924), a quien también debemos “El fin del arte” (1984), sostiene que para una obra de arte contemporáneo, la belleza es una especie de «delito estético». A principios del siglo XX, un objetivo primordial del arte era todavía lograr la delectación estética, pero en cierto momento la belleza se fue, se convirtió en una opción y no en una obligación. Así, la opción de hacer algo bello está indicada cuando contribuye al significado de la obra. Lo que Danto llama «belleza interna» tiene un recorrido más intelectual que meramente visual y nos indica que la obra tiene una función extra, además de presentarse para ser mirada. Pero la belleza sigue siendo un valor fundamental, su diversidad se abre y se hace compleja con el paso del tiempo. Imaginar un mundo sin belleza es como imaginar la vida sin bondad; es algo que nadie querría vivir. Por eso el arte nos somete continuamente a preguntas que en el fondo constituyen toda una aventura: la de re-conocernos en relación al mundo que vivimos.

“Edertasuna hala ere / Belleza a pesar de todo” es el título de la exposición que presenta Detritus (Donostia, 1964) en la Ganbara del Koldo Mitxelena Kulturunea de Donostia hasta el 18 de abril. La obra de Detritus da pie a hablar de rasgos que han quedado ocultos tras la cortina del abatimiento, del trauma de vivir y del nihilismo dolorosamente productivo a través del cual se ha juzgado siempre su trabajo. Por eso, no puede pasarse por alto el sincretismo cultural de su pintura, en la que se funden textos, citas, poesía y todo tipo de técnicas para componer imágenes fragmentadas, episodios que no tienen un espacio ni un tiempo único; cuadros dentro de cuadros e historias dentro de historias. Este espacio indefinido compone un escenario operístico, un limbo creado especialmente para que convivan personajes reales y ficticios, para que las ensoñaciones, los pensamientos visuales y los objetos de deseo se acoplen a los textos con todo el vértigo y la zozobra de su estilo inconfundible. La angustiosa presencia de la figura humana ha ido ganando en definición y, más allá de la virtud técnica de su representación, se han disuelto las figuras de sujeto y objeto, y con ellas, aquello que separa el cuerpo del mundo. En esta exposición, el concepto de belleza nos interpela directamente, porque no hay concesiones, hay preguntas dirigidas tanto a la razón como a las entrañas de quien observa todo este despliegue energético.

El “Creative commons film festival” (http://cineccdonostia.org/) aborda su “sección ecología” los días 24, 25 y 26 de este mes en el Centro Cultural Okendo de Donostia. El día 24 se proyectará “Requiem nuclear”, dirigida por Sonia Llera. Es la crónica de un viaje que relata la historia de la energía nuclear a través de las experiencias y reflexiones de los primeros activistas antinucleares, y que nos lleva hasta las obsoletas y amenazantes centrales de Garoña, Ascó y Vandellós.

El día 25 podrá verse “Fractura, la maldición de los recursos”, de Eduardo González, que aborda la fractura hidráulica, o fracking, y sus consecuencias medioambientales. Ya el día 26, la película “#Oligopoly 2: el imperio eléctrico contra todxs”, de Alba del Campo, nos relata la lucha contra el cambio climático.

Cine de resistencia y “Belleza, a pesar de todo” en la intención de compartir inquietudes y de abordar nuevas formas de rebeldía.