No es una reivindicación nueva. Hace unos meses, en Barakaldo, denunciaron la precariedad del albergue que el Consistorio había habilitado en el gimnasio del polideportivo de Lasesarre, que debía ser desalojado a primera hora de la mañana para dar cabida a los usuarios de la instalación deportiva.

Ayer, a las 21.00, en la Herriko Plaza de esa misma localidad, concejales y militantes de EH Bildu anunciaron que iban a pernoctar en los cajeros automáticos de BBK de ese mismo lugar y en los de Capitán Mendizabal, en Santurtzi. Con esa acción simbólica, quisieron llamar la atención sobre la situación que «sufren una gran cantidad de personas que se ven obligadas a dormir, día tras día», en las calles de los municipios de Ezkerraldea, y exigir que se pongan en marcha medidas «para solucionar este drama».

La propuesta de la coalición es clara y conocida, la creación de un albergue «permanente» entre los cuatro municipios de la comarca. Para saber de la intención del resto de fuerzas políticas, han presentado mociones en los ayuntamientos.

La iniciativa soberanista se tratará el martes en los plenos municipales de Barakaldo y Santurtzi, y el jueves en Sestao. En el caso de Portugalete, se debatirá el próximo mes a raíz de que la Alcaldía haya solicitado un informe.

En las explicaciones que dieron ayer antes de acudir a los cajeros, dijeron que la situación que viven los sin techo «no da más de si» tras la sucesión de muertes de personas en Bizkaia; cinco en Bilbo y una en Barakaldo. Recordaron que la ley plantea «claramente» que los municipios de más de 20.000 habitantes deben de disponer de una infraestructuras asistencial de estas características.

EH Bildu estima que la solución hay que buscarla a nivel comarcal, por lo que piden la implicación de los cuatro consistorios. Remarcaron que, después de los gastos que se derivan, los ayuntamientos afectados por la propuesta serían capaces de poder hacer frente a esa gastos, valiéndose para ello de alguna de las instalaciones de las que disponen y que se podrían utilizar.

No ocultaron que el albergue es un «planteamiento paliativo», ya que «el verdadero problema es la exclusión y la desigualdad social» que genera el sistema capitalista. «Eso -enfatizaron- es lo que tiene que cambiar», pero reconocieron que mientras tanto no están dispuestos a permitir que «ninguna persona siga sobreviviendo en condiciones infrahumanas, sin ningún tipo de apoyo por parte de las instituciones».