Raimundo Fitero
DE REOJO

Sospecha

La pasada noche de sábado siguió la guerra entre dos programas televisivos políticos de ambas partes del duopolio comercial. Y lo hizo mostrando la parte más asquerosa del modelo. La de enfrentar a políticos o ciudadanos de tendencia más o menos progresista a la jauría de periodistas que en vez de entrevistar, acosan, insultan, muestran sus más que conocidas querencias al totalitarismo y el pensamiento subvencionado por la banda del PP.

Si se mira a simple vista parecen ambos, “La Sexta noche” y “Un Tiempo Nuevo”, plataformas para mostrarse los líderes de Podemos, pero la encerrona es de tal magnitud, que se trata de someterlos a un tercer grado que se excede de manera constante. Pero no solamente por las presiones, preguntas, insidias y mentiras, sino porque se enmarcan en un tono de vocerío, demasiado desabrido, que convierten los programas en auténticos programas de telebasura.

Lo que le hicieron a Willy Toledo, con su colaboración que quede claro, porque no supo sobreponerse y se metió en un lugar impropio, dejando su cuello al descubierto para los ataques de los llamados periodistas del “ABC” y “La Razón”, y de un Javier Ruiz, siempre dispuesto a convertirse en el comodín del PP y por eso le han premiado con “Las mañana de Cuatro”. Hasta hace poco los del PP no querían aparecer en estos programas y dejaban sus chicos de la prensa para ladrar. Ahora mandan a los más impresentables, cínicos, salvajemente mentirosos y que tiene el insulto como única manera de argumentación. Además contaminan todo, crean un escándalo constante por lo que destruyen desde dentro los programas. Es una táctica, sin dudas, pero no queda claro si es en complicidad con los responsables de los programas o que simplemente les dejan su cuota y se empoderan de todo. Una sospecha fundada.