Barcelona ante Olympiacos y Real Madrid contra Anadolu Efes completan los cruces de cuartos de final, aunque estas eliminatorias arrancarán mañana. Las dos primeras eliminatorias se disputarán los días 14, 16, 20, y si fuera necesario, el 22 y el 28. El que enfrente a madridistas y Efes el 15, 17 y 21, más 23 y 28, y el mismo calendario para Barça y Olympiacos, con la salvedad de que el desempate se jugaría el miércoles 29.

Un año más, pocos cambios en la élite del baloncesto europeo. Como bien dijera el maestro Bozidar Maljkovic a este periódico, «en mi época aún era posible que equipos sin tanto presupuesto como Jugoplastica o Limoges pudieran llegar a la Final Four y ganarla. Hoy es imposible». El límite para la élite la sigue marcando el dinero y la experiencia. O si no, que se lo pregunten al Baskonia, eliminado por dos puntos de basket average. O al Alba Berlín, que se quedaba a las puertas cuando tenía el pase en su mano. Al cuadro que dirige Sasha Obradovic le bastaba con ganar en su cancha al Maccabi, pero el vigente campeón de la Euroliga, liderado por el ex de GBC Devin Smith, tiró de experiencia para batir a la escuadra alemana y dejarla con un palmo de narices.

Condenados a perder... y a ganar

Y bueno, que el Maccabi es especialista en «colarse» en Final Fours sin invitación. El año pasado la escuadra macabea parecía «destinada» a caer ante un Armani Milano que preparaba la Final Four de su ciudad; una vez cosechada la sorpresa, en semifinales una canasta sobre la bocina de Tyese Rice significó el adiós del CSKA de Etore Messina. En la finalísima, los nervios traicionaron al Real Madrid, así como la propuesta física del cuadro israelí, para imponerse en la prórroga por 98-86, con Ricky Hickman, Rice, Alex Tyus, Devin Smith y David Blu dejando a los de Pablo Laso compuestos y sin Euroliga.

Junto con el Maccabi, el Real Madrid aspira a regresar a otra final. Los merengues son, sin duda, los que más presión tienen, toda vez que aspiran a ganar en su casa, culminando una frustrante sucesión de dos subcampeonatos. Ante un Anadolu Efes que bastante parece haber hecho con llegar a esta ronda –podría haber estado el Baskonia–, el cuadro merengue tiene la duda de Rudy Fernández por molestias en la espalda. Pero claro, ¡viendo cómo jugaron el «derbi futbolero» los Mejri, Carroll, Rodríguez o Llull...!

Resulta increíble, pero una de las eliminatorias más desequilibradas es la que enfrenta al CSKA de Moscú con el Panathinaikos. Dimitris Itoudis se enfrenta a su exequipo, un PAO que vive los últimos coletazos de Diamantidis, mientras que Dusko Ivanovic hace lo que puede desde el banquillo. La lealtad del OAKA está asegurada, pero el cuadro heleno llega al cruce con un balance de 12-12 –contando la primera fase y el Top 16–, mientras que los rusos presumen de un 22-2 de balance de un Kirilenko cada vez más entonado y de haber recuperado a Khryapa. Las dudas saltan por el recuerdo de la final perdida de 2012 y la semifinal del año pasado, por la bisoñez de Itoudis y porque el PAO, sin nada que perder, gana en los años impares: 1997, 2007, 2009 y 2011.

El Barça también es favorito frente a Olympiacos, pero sin tanta ventaja, ya que tiene a Navarro entre algodones, a Abrines infiltrado y una Tomicdependencia que podría pasar factura. Mientras, Olympiacos parte con la duda de Spanoulis. El «mago de Larissa» se ha pasado lesionado parte del Top 16 y, si llega, no lo hará a tope. Los del Pireo deberán fiarse de su defensa y de lo que haga gente como Petway –que también ha estado de baja–, Lojeski, Printezis o Sloukas.

¡Que vienen los turcos (de una vez)!

Pocas novedades… salvo el regreso de los equipos turcos con dos candidatos a volver a una Final Four primera vez desde el año 2000, aunque en realidad, hay un único candidato a ganar: el Fenerbahçe.

La escuadra de Zeljko Obradovic le ha disputado de tú a tú al CSKA de Moscú el liderato en el Top 16, y si no fuera por la fractura del tendón de Aquiles de Ricky Hickman, quizá hubiera que catalogarlos como favoritos a llegar y ganar la cita madrileña. Pero claro, primero deben batir al Maccabi que... cabe recordar... es el vigente campeón.