ELCHE CLUB FÚTBOL 1

REAL SOCIEDAD 0

La Real sumó su cuarto partido consecutivo sin ganar en Elche y sin que los experimentos de David Moyes den resultados. El técnico escocés se marcaba los objetivos de buscar victorias para acabar lo más arriba posible y dar oportunidades a sus jugadores, pero ni lo uno ni lo otro.

Para probar cosas está la pretemporada y hasta que acabe la Liga es importante obtener resultados y mejorar el pésimo juego que practica esta Real. El partido de ayer en Elche, como el anterior ante el Deportivo, no son mucho peores que otros jugados por la Real, pero la ruptura de la racha de resultados deja en evidencia que este equipo no sabe a qué juega desde que Jagoba Arrasate se vio incapaz de enmendar la situación.

Y lo peor es que la buena racha de resultados no ha sido aprovechada para coger confianza y acabar la temporada con buenas sensaciones. Partidos como el ayer no ayudan a ese objetivo porque la Real fue incapaz de crear ocasiones de gol ante el Elche y apenas reaccionó de manera tímida al verse en desventaja en el marcador por el gol de Jonathas.

Cinco cambios

El planteamiento de David Moyes resultó un experimento comparable al del Vicente Calderón, con cinco cambios con respecto al once que comenzó ante el Deportivo al entrar Elustondo, Mikel González, De la Bella, Markel y Zurutuza en lugar de Ansotegi, Iñigo Martínez, Yuri, Pardo y Agirretxe.

David Moyes experimentó con un 4-4-2 con Zurutuza en la banda izquierda, Xabi Prieto en la derecha y Canales y Chory Castro como jugadores más adelantados y sin una referencia clara arriba en ausencia de Agirretxe, ni un creador sin Pardo.

Como en el Calderón, este tipo de planteamientos solo pueden ser válidos para jugar fuera de casa con un centro del campo más defensivo para salir a la contra. Pero como entonces, el rival se adelantó demasiado pronto y, otra vez, en un error blanquiazul, porque Markel perdió el balón ante la presión de Mosquera y Jonathas, el jugador ilicitano más peligroso, no desaprovechó su oportunidad.

Fue una jugada en la que la fuerte presión del Elche encontró premio, justo lo que no hace la Real, que siempre recupera el balón muy atrás y tiene muchos metros que recorrer para llegar a la portería rival.

Sin Pardo ni Carlos Vela ni Agirretxe, el equipo de Moyes no tenía ni un jugador para crear ni referencias ofensivas en las que confiar, y en todo el primer tiempo apenas fue capaz de crear peligro en dos jugadas por la banda izquierda que Xabi Prieto no remató bien.

Y lo más triste fue que esos minutos que siguieron al gol del Elche fueron los menos malos de todo el encuentro, con una ligera mejoría que permitió a la Real jugar en el campo ilicitano, pero sin demostrar en ningún momento la calidad que se le supone a un equipo con un presupuesto mucho mayor.

Pero a falta de dinero Escribá ha sabido armar un equipo serio y ordenado que trabaja desde el primer minuto hasta el último, lo que le permite estar lejos de la zona de peligro.

Un segundo tiempo horroroso

El segundo tiempo de la Real fue lamentable, sin crear la más mínima inquietud al equipo ilicitano. David Moyes siguió sus pruebas y cambió sustancialmente su equipo con la entrada de Agirretxe en punta y se acercó a la forma de jugar que mejores resultados ha dado a la Real, con Vela en la derecha, Xabi Prieto en el centro y Chory Castro en la banda izquierda.

Pero tampoco el equipo realista mejoró así y esta fórmula de jugar solo duró una docena minutos porque con la entrada de Pablo Hervías en la derecha en lugar de David Zurutuza, Carlos Vela pasó a jugar de media punta por el centro con Xabi Prieto junto a Esteban Granero en el doble pivote.

Ninguna de las variantes dio resultados y el Elche estuvo más cerca de marcar su segundo gol que la Real el empate. Ni Carlos Vela, cuya calidad, velocidad y goles necesita un equipo al que no le sobran esas virtudes, cambia la dinámica triste en la que se encuentra un equipo al que se le va a hacer muy largo el final de temporada como no reaccione pronto. Y para reaccionar lo mejor es que David Moyes se deje de experimentos y cambie lo justo cada partido.

Moyes: «No fue problema de actitud, sino de calidad»

David Moyes encajó con resignación la derrota, y admitió que el conjunto donostiarra no hizo méritos para puntuar en el Martínez Valero. «No hemos jugado bien y hemos cometido un error que nos costó el gol. Pero luego no hemos sido capaces de crear ocasiones y no puedo tener quejas del resultado», argumentó el preparador escocés. Moyes indicó que el problema de la Real «no fue de actitud, sino de calidad. Los jugadores han corrido mucho en busca del empate, pero nos faltó calidad», insistió. «El Elche ha merecido ganar el partido. Ha creado más ocasiones y ha jugado mejor», afirmó, confiando en que sus jugadores mantengan la motivación. «Es mejor estar así que luchando por la permanencia. Tengo un gran respeto por la competición y cada partido es importante y difícil. En mi vida he jugado un partido que no sea importante para mí y espero que los jugadores piensen igual», argumentó. Por último, el técnico se refirió a la reaparición de Vela, del que comentó que «aún no está para jugar 90 minutos», si bien «va dando muestras de recuperación en su rodilla».

Esteban Granero, por su parte, se quedaba con que el equipo lo había «intentado», pero que ellos se sintieron «más cómodos» en todo el partido. «Hemos empezado muy mal, pero al final de la primera parte hemos tenido algunas ocasiones. En la segunda apenas ha habido fútbol. Ellos se están jugando la vida y se ha notado».GARA

Jon Ansotegi causó baja por enfermedad

Jon Ansotegi causó baja de última hora por enfermedad y su ausencia se sumó a la de Iñigo Martínez. Estrada fue el otro jugador realista desplazado a Elche que no llegó a vestirse por decisión técnica.

Entrenamiento vespertino en Zubieta

La Real tendrá esta tarde a las 15:00 el habitual entrenamiento postpartido y comenzará a pensar en el próximo encuentro de Liga que el equipo blanquiazul jugará el sábado en Anoeta contra el Villarreal a las 22:00.