Jon ORMAZABAL
Pelota

Aimar Olaizola ejerció de pegador ante Altuna III

Haciendo mucho daño con el pelotazo inicial, Mikel Urrutikoetxea sacó de la cancha a un Jaunarena menor.

No hubo lugar a ningún tipo de sorpresas y Aimar Olaizola y Mikel Urrutikoetxea solventaron sus compromisos ante Jokin Altuna y Jon Jaunarena con absoluta solvencia, por lo que Asegarce ya se ha asegurado la presencia de un delantero de su empresa en la final, ya que el de Zaratamo se enfrentará en semifinales a Oinatz Bengoetxea, que el viernes por la noche prolongó su estado de gracia, eliminando al subcampéon del año pasado por poseer muchos más recursos ofensivos. El ganador del Irujo/Rezusta de hoy en Eibar será el rival del de Goizueta.

Olvidados los problemas físicos, Aimar Olaizola ha vuelto a la competición con la derecha fresca y ayer hizo eso que ni Álvaro Untoria ni Aitor Zubieta consiguieron en las dos eliminatorias anteriores; impedir que Jokin Altuna pudiera hacer gala de su exquisita técnica, teniéndolo todo el partido con los pies por detrás del cinco.

Sacando provecho de la chapa del juez que le concedió el primer saque y al posterior saque-remate, Altuna III alimentó su esperanza y la de los muchísimos aficionados que se desplazaron desde Amezketa y Tolosaldea adelantándose 5-0.

El propio Aimar Olaizola colaboró también con esas perspectivas, ya que en el comienzo del partido no parecía terminar de gozar sus pelotazos. Sin embargo, un resto de sotamano despejó esas incertidumbres y las opciones del de Aspe se desvanecieron a la misma velocidad en la que la derecha del de Goizueta comenzó a carburar.

Fiel a su costumbre de hacer en todo momento lo que la ocasión requiere y sabiéndose superior en el peloteo, el de Asegarce planteó un partido muy serio, sin ningún tipo de florituras y estuvo perfecto en lo suyo. Sin forzar esas posturas de aire que le obligaron a abandonar el Parejas, apenas cruzó un par de ganchos de zurda, Olaizola II se dedicó a pegar y pegar, arrimando la pelota todo lo posible a la pared izquierda y Jokin Altuna no encontró el antídoto.

La magia de su muñeca no es efectiva con los pies detrás del cinco y su resistencia se fue minando en la medida en la que su rival seguía dándole ahí donde más le duele, acabando con el sueño del de Amezketa.

Urrutikoetxea, muy solvente

Son varios los que avisan de que este puede ser el año de la explosión definitiva de Mikel Urrutikoetxea y el de Zaratamo dejó muy buenas sensaciones en su estreno ayer en el Bizkaia, por mucho que Jon Jaunarena tampoco mostrara su mejor cara en el recinto bilbaino.

El de Zaratamo encarriló muy pronto el partido con un 7-0 de parcial en el que acertó con el saque –le hizo seis para el 12-2– y estuvo tambien entonado a la hora de arrimarle pelota al de Leitza, al que sacó a pelotazos. Pero además, el partido resultó más peloteado de lo que sugiere el marcador y el vizcaino se defendió muy bien cuando le tocó hacerlo. Lo mismo sucedió cuando tuvo que entrar a rematar en un partido sin historia.