Bera Bera ha adelantado a la tarde de hoy su último partido en casa de esta temporada, frente al Zuazo (20.00, Muñiz y Ordoki –Nafarroa–), para que el presidente de la Federación Española, Francisco Vázquez, pudiera entregar en persona el trofeo de campeonas de Liga a las donostiarras, dado que previamente ya se había comprometido a hacer lo propio con el campeón de la Liga Asobal, el Barcelona, mañana en el Palau Blaugrana.

La celebración del título ante su afición centrará el interés de la jornada, pero también la despedida de cuatro jugadoras que ayer confirmaba el club. Elorza y Núñez dejan el equipo donostiarra tras aceptar la oferta del Besançon francés, entrenado por Raphaelle Tervel, que conoce de cerca a Bera Bera porque jugó tres temporadas y media en Donostia –desde la 2006/07 hasta diciembre de 2009–, para militar después en el Larvik noruego, dos campañas en Itxako y otras dos en el Györi, con quien fue campeona de la Champions antes de retirarse al final de la temporada 2013-14 para volver al club donde se formó, esta vez para hacerse cargo del equipo.

Las otras dos bajas anunciadas son las de la central andoindarra Nagore Arizaga, que ha cumplido cinco años en el equipo, en un papel secundario, y tras finalizar sus estudios de Enfermería ha decidido dejarlo para centrarse en su futuro laboral; y la navarra Amaia Azanza, que llegó el pasado verano, contó con algunas oportunidades en la primera parte de la temporada para perder protagonismo en el tramo final, y que buscará en otro destino los minutos que le han faltado en Donostia.

El reto de seguir batiendo marcas

Pero la Liga no ha terminado todavía, quedan dos jornadas por disputar, y el propio alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, instaba amablemente a las jugadoras a no relajarse en este tramo final liguero durante la recepción del Ayuntamiento al club el lunes, a la vez que anunciaba su presencia en el partido.

El resultado del choque ya no tiene ninguna trascendencia clasificatoria para Bera Bera, pero aún quedan otros objetivos atractivos, además de la oportunidad de ofrecer un buen espectáculo a su afición en el último partido de la temporada en Bidebieta. Por ejemplo, alargar su récord de victorias consecutivas en una Liga, que estableció en 13 hace dos temporadas cuando ganó su primer título, pero que en esta ya ha alcanzado los 15 (ha ganado todos sus partidos ligueros desde el empate a 22 ante el At. Guardés, el 12 de noviembre, en la novena jornada).

Y si lograra vencer hoy, aún le quedaría otro reto en su salida a León de la última jornada, el sábado que viene, establecer el récord del mayor número de victorias en una temporada, las 23 que sumó en las dos últimas Ligas. En esta lleva ya 22, y si gana los dos partidos que le quedan alcanzaría las 24 en 26 jornadas.

Pero sobre todo es la ocasión para que las donostiarras disfruten de este nuevo título ante sus seguidores. Tras necesitar llegar hasta la última jornada para asegurarse su primer título liguero en Castro, el 11 de mayo de 2013, con el Elche pisándole los talones, en la pasada temporada le sobró una jornada para lograr repetir el 10 de mayo, esta vez en Bidebieta, con el Mar Alicante como rival. Y en esta ocasión, a pesar de las dificultades, el título quedó decidido todavía antes, en la antepenúltima jornada, y en la pista del rival que le discutía la Liga, el Rocasa.

Zuazo tampoco se juega gran cosa, aunque podría aprovechar la posible relajación de Bera Bera para endulzar el mal sabor de la segunda vuelta liguera, en la que solo ha sumado seis puntos (tras lograr 15 en la primera), e intentar de paso mejorar su octava posición, a un solo punto del Porriño. Tras una racha negativa de siete derrotas, las vizcaínas han ganado a Málaga y Cleba en las últimas semanas, y querrán dar una buena imagen.

La factura del éxito: Elorza y Núñez al Besançon

Sin apenas tiempo para saborear la consecución del tercer título de Liga, esta semana ha trascendido la marcha del equipo de Patricia Elorza y María Núñez al Besançon, campeón de la Segunda División francesa y que jugará la próxima temporada en la máxima categoría. Es el precio del éxito para Bera Bera, que no puede competir con los mayores presupuestos de los clubes franceses, saneados y con un gran control de las cuentas de cada club para garantizar la limpieza de sus Ligas y los derechos de sus plantillas, y que por ello se ha convertido en el destino preferido para muchas jugadoras que han abandonado la División de Honor española en los tres últimos años para labrarse un futuro profesional.

Elorza y Núñez llegaron a Bera Bera hace tres temporadas, la gasteiztarra procedente del Castro y la canaria del Mar Alicante, dos clubes que ya han desaparecido. Ambas se convirtieron en el eje central de la defensa que ha ayudado a obtener ocho de los nueve títulos logrados por las donostiarras los tres últimos años (con los que el club ya suma 11), y también han sido importantes en la producción ofensiva, con 290 goles de Elorza hasta hoy, y 234 de Núñez. Su labor en el club se ha visto recompensada con la presencia en la selección española, donde Elorza está ya consolidada, y Núñez acude con asiduidad en busca de una plaza fija.

A Tati Garmendia y Montse Puche les toca ahora recomponer el equipo para mantener su nivel competitivo. Hasta esta semana estaba abierta la vía de la lateral alemana internacional Laura Steinbach, con la que lleva meses en contacto tras haberse ofrecido a varios clubes (es la pareja del alavés Iker Romero, que ha puesto fin a su carrera en el Füchse Berlin, y van a instalarse en Gasteiz). Habría sido un bombazo, pero sus pretensiones superaban las posibilidades del club, que hace unos días decidía descartar su fichaje.

También interesa la pivote de Zuazo Ainhoa Hernández, aunque el abono de los derechos de formación, una cifra importante, podría frustrar su llegada, o al menos demorarla hasta la próxima temporada, cuando ya no estaría sujeta al pago de los citados derechos. J.C.E.