Bradley Wiggins establecía ayer en el Velódromo de Londres el nuevo récord de la hora, otro hito a su palmarés en la que constan las medallas de oro olímpicas en Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012, un Tour en el año 2012 y un campeonato del mundo en la disciplina de contrarreloj individual en 2014.

Sin embargo, el ciclista inglés no cumplía del todo sus expectativas. Cerraba su actuación estableciendo la nueva plusmarca en 54,526 kilómetros, 1.589 metros mejor que el récord de Alex Dowset, del pasado 2 de mayo, pero lejos de su idea de alcanzar los 55 kilómetros y establecer, según sus propias palabras, «una marca que no se pudiera superar los 20 próximos años».

El nuevo plusmarquista mundial de la hora dio 219 vueltas a la pista del Lee Valley VeloPark, ante 6.000 aficionados.

«Estoy contento de haberlo logrado y que se me compare con las leyendas. Con un equipo pequeño, hemos pasado por mucho. Estoy feliz de estar en tan buena compañía», declaraba.

Wiggins es, a sus 35 años, el sexto corredor que encadena un Tour y el récord de la hora, tras Lucien Petit-Breton, Fausto Coppi, Jacques Anquetil, Eddy Merckx y Miguel Indurain. El de Atarrabia, por cierto, estuvo presente en el evento londinense.