Jon ORMAZABAL
Pelota

Otro punto y seguido para Oinatz Bengoetxea

El de Leitza disputa esta tarde en Errenteria su primer partido tras la renuncia a la final del Manomanista.

Por suerte o desgracia, no es la primera vez que Oinatz Bengoetxea regresa a las canchas tras una lesión. De hecho, las ha superado mucho más graves, pero la vuelta de hoy en Errenteria sí es especial porque llega un mes después de haber tenido que tomar una de las decisiones más complicadas de su carrera profesional; renunciar a jugar una final del Manomanista.

La rotura en el dedo índice de su mano izquierda ya ha soldado y, aunque hoy saltará a la cancha con un dedal de protección, los dolores que le impidieron jugar contra Aimar Olaizola en el Bizkaia han desaparecido y tras la exigente prueba realizada el lunes y el pertinente permiso médico, el delantero de Leitza está deseoso de regresar a las canchas, algo que hará hoy, acompañado por Albisu, ante Olaizola II-Untoria, en un festival de muchos quilates.

Pero al margen del dolor físico, la renuncia también supuso un fuerte golpe moral, pues llegó posiblemente en el mejor momento de un Bengoetxea VI que, ahora mismo, solo quiere mirar hacia adelante. «Todo está olvidado, pasamos momentos muy malos; la rotura, tratamos de apurar los plazos pero luego no me vi capacitado para hacerlo y tomar la decisión de renunciar… Creo que al final fue una decisión acertada y ahora hay que mirar hacia adelante y con las ganas de recuperar el punto de juego cuanto antes», señaló en Euskadi Irratia.

Normalidad absoluta

A pesar de que los intereses de Bengoetxea y Urrutikoetxea se cruzaron, ambos se han portado de manera intachable desde entonces. «Creo que hemos hecho las cosas bien, o, al menos, lo hemos intentado. La situación era complicada para ambos, tratamos de llevarlo lo mejor posible y creo que así lo hicimos. Urrutikoetxea ha quedado campeón con todo merecimiento, ganarle a Aimar en Bilbo es muy, muy difícil y él lo logró en un gran partido y salió campeón».