Con un programa que podría resumirse en un no rotundo a la austeridad, la inmigración y la clase política, Amanecer Dorado se presenta como la última alternativa tras seis años de crisis económica que se llevó por delante un 25% del PIB griego y ha recompuesto por completo el tablero político nacional.

En el acto central de campaña, celebrado la noche del miércoles en el centro de Atenas, a un kilómetro de un campamento de refugiados afganos, su líder, Nikos Mijaloliakos, dijo haber elegido deliberadamente ese barrio ateniense por el que «los griegos tienen miedo de moverse» debido a la cercanía del campamento.

«Las ventas de mi tienda han caído un 60% en los últimos días, la gente evita pasar por el barrio», señaló a modo de eco Panagiotis, propietario de un negocio de fotografía junto a la plaza Victoria, cerca de donde decenas de familias afganas, con niños en los brazos, llevan varios días acampando.

Tassos Boubalos, empleado de un quiosco, se quejaba de que «apesta por todas partes». «Los países occidentales, especialmente Francia y Alemania, son los responsables de esta miseria. Grecia no está protegida contra la invasión de los inmigrantes», sostuvo.

«Todo está sucio, las autoridades deben hacer algo por nosotros», reclama Abolfazl Imbrahimi, un joven afgano decidido a continuar viaje para reunirse con su tío en Finlandia.

La entrada en Grecia de 230.000 refugiados este año ha alimentado la retórica de la extrema derecha a tres días de las elecciones. «Si el Gobierno no puede controlar la frontera, que se vaya», lanzó Mijaloliakos, apelando al cierre de fronteras y a su protección por el Ejército.

El miércoles, el líder solo estuvo arropado por 500 personas, pero Amanecer Dorado, al que los sondeos dan entre un 5% y un 7% en intención voto, lo que le mantendría como tercera fuerza, por detrás de Syriza y Nueva Democracia.

A pesar de los procesos penales contra sus dirigentes por crímenes y violencia racista, Amanecer Dorado «saldrá reforza- do» el domingo porque los griegos creen que «su dirección es perseguida por sus ideas», señala Antonis, un militante.

«Patria, honor...»

Mijaloliakos y sus diputados fueron imputados por «formación de una organización criminal» tras la muerte en setiembre de 2013 de un rapero antifascista, Pavlos Fyssas, a manos de un miembro del partido. En años anteriores, se acusó a sus militantes de decenas de agresiones a inmigrantes, homosexuales y discapacitados.

Después de 18 meses de prisión preventiva, el líder y sus diputados fueron puestos en libertad condicional en marzo, días antes de la apertura del juicio, que sigue en curso.

Amanecer Dorado encarna «la desesperación y la decepción de los electores hacia los otros partidos y quiere ser el ‘héroe antisistema cazado por un sistema corrupto’», explica Manolis Alexakis, profesor de Sociología Política de la Universidad de Creta.

En los últimos años el partido optó por adoptar un perfil bajo. Ahora rechaza el calificativo de neonazi y se presenta como un «movimiento nacionalista» que va a echar a los extranjeros. Su principal lema «Patria, honor, Chryssi Avghi (Amanecer Dorado en griego) sustituye al más agresivo «Sangre, honor, Chryssi Avghi, pero siguen excluidos de los debates televisivos.

La estrategia genera, no obstante mucho escepticismo, explica a AFP Antonis Rellas, de una asociación de personas con discapacidad. «Quieren entrar de nuevo en el Parlamento, y dicen lo que la gente quiere oír. Pero no creo que exista un Amanecer Dorado bueno y un Amanecer Dorado malo. Al igual que no existe un fascismo bueno y un fascismo malo. Esta gente no tiene cabida» en una democracia, subraya.