Hacer de Araba un centro puntero en tecnología e innovación en materia aeronáutica. Este es el objetivo del plan Hegaraba, presentado por EH Bildu ayer en Gasteiz. La coalición propone impulsar el parque tecnológico de Miñao y el aeropuerto de Foronda con la robótica, el mantenimiento de aeronaves y el diseño de drones como ejes de actuación, sin olvidar el transporte aéreo de mercancías y los vuelos chárter.

En una rueda de prensa ofrecida en el EHBilgune, los portavoces soberanistas en las Juntas Generales de Araba, Kike Fernández de Pinedo, y en el Ayuntamiento de Gasteiz, Miren Larrion, explicaron los cuatro pilares de este proyecto, cuya inversión total no superaría los 6 millones de euros. A este respecto, indicaron que Hegaraba se podría poner en marcha con una inversión pública de 800.000 euros durante los primeros cinco años.

Este dinero debería servir para abrir las puertas de la capital alavesa al mercado de drones y aeronaves robotizadas sin tripulación. Un negocio en auge que, según Bruselas, puede acaparar el 10% de la facturación del sector aeronáutico en los próximos diez años. Basta con recordar que, a día de hoy, existen más de 400 proyectos relacionados con los vehículos aéreos no tripulados (UAV).

Los portavoces de la coalición destacaron que en Euskal Herria hay empresas punteras en el ámbito de las aeronaves robotizadas sin tripulación, y tanto la UPV-EHU como la MU cuentan con proyectos educativos relacionados con este sector. Ambiciosos planes de estudio que se podrían complementar con nuevos cursos de FP relacionados con la fabricación de UAV y con su mantenimiento.

La producción de estos aparatos podría dar pie a la recuperación del H24 para Foronda, donde se realizarían las prácticas y las pruebas de los aparatos. Asimismo, el plan de EH Bildu incluye la creación de un centro de mantenimiento de aeronaves en el aeródromo alavés.

Los datos recabados por la coalición revelan que el mantenimiento de las aeronaves genera más actividad económica que su propia fabricación. «Comprar un helicóptero requiere de una inversión de 1 millón de euros, pero mantenerlo en servicio durante una vida útil de diez años requiere de una inversión adicional de 7 millones de euros. Y en el caso de los aviones el coste se dispara», subrayaron antes de advertir de que en el Estado español solo existe un centro de este tipo, ubicado en Teruel.

El centro de mantenimiento, que requeriría de la puesta en marcha de dos ciclos formativos –Técnico Superior en Mantenimiento Aeromecánico y Técnico Superior en Mantenimiento de Aviónica– podría dar pie al desarrollo de la industria de los materiales compuestos, entre los que destacan la fibra de carbono y la fibra de vidrio. Los denominados composites se emplean en el sector aeronáutico, eólico y automovilístico.

En el Parque Tecnológico de Araba hay tres empresas vinculadas al desarrollo de composites: IDEC Ingeniería, Bambhaus y HP Composites. Tres sociedades mercantiles afincadas en un parque «infrautilizado», ya que solo se ha ocupado el 30% de sus 1,9 millones de metros cuadrados. Cabe recordar que en Miñao trabajan cerca de 800 personas, tres cuartas partes en ocho firmas relacionadas con el sector aeronáutico.

También está «infrautilizado» el aeropuerto de Foronda, que en 2014 registró un incremento del 19% en el transporte de mercancías. EH Bildu, que reclama la apertura de un Puesto de Inspección Fronterizo (IPF) y la recuperación del H24, quiere que las instituciones de la CAV valoren la posibilidad de convertir el aeródromo en un centro de operaciones para vuelos chárter, y exploren las posibilidades que ofrecen los vuelos low cost y los recorridos transoceánicos.