Los datos publicados ayer por el Ministerio español de Empleo y Seguridad Social reflejan un descenso del paro en noviembre de 2.784 personas (-1,41%), una bajada generalizada en todos los territorios y en todos los sectores, salvo en Nafarroa, donde la bajada global es de solo 50 personas y el sector de Industria registra un significativo aumento de 138 parados.

En cuanto a ocupación, la afiliación ha registrado en noviembre un ligero aumento mensual del 0,28%, al contabilizarse 3.256 trabajadores más afiliados a la Seguridad Social, si bien en Nafarroa baja en 320 personas. El aumento interanual en Hego Euskal Herria llega al 2,18%. Los sindicatos, sin embargo, creen que ello se debe a la elevada rotación laboral o reparto de trabajo en condiciones más precarias, como consecuencia del aumento de los contratos temporales y a tiempo parcial.

Así, los datos oficiales reflejan un descenso de la contratación del 12,7% respecto al mes anterior, hasta 102.413 contratos, de los que solo el 6,5% (6.637) son indefinidos, frente al 93,5% temporales (95.776), mientras los contratos a jornada parcial suponen prácticamente el 39%. A ello hay que añadir que la mitad de los contratos temporales tiene una duración inferior a un mes, mientras que otro tercio de la contratación temporal tiene una duración indeterminada.

Protección por desempleo

Otro dato que preocupa a los sindicatos es el del fuerte descenso de la protección por desempleo. Así, el porcentaje de parados que no percibe ninguna prestación se acerca ya a seis de cada diez, al quedar fijado en el 58,5% (según los datos de octubre, los últimos publicados). Es decir, un total de 115.651 parados no cobra ninguna prestación, y de los que sí lo hacen, solo 44.324 (el 22,5% del total) cobran una prestación contributiva.

Ante estos datos, el sindicato LAB concluye que «la creación de empleo basura con salarios de pobreza en ningún caso puede considerarse un éxito de las políticas económicas y de las reformas acometidas».

En esta línea, ELA subraya que el incremento del PIB «no está generando una distribución más justa de la riqueza y tampoco está creando apenas empleo, siendo el creado en todo caso mínimo y cada vez más precario».

CCOO, por su parte, cree que la calidad del empleo «se está precarizando de forma evidente a través del mantenimiento de la temporalidad, la disminución de la duración de los contratos y sobre todo con el abuso de la contratación a tiempo parcial», mientras UGT advirtió de que «no se puede consolidar la norma de la temporalidad y parcialidad» en el mercado laboral.

Frente a estas valoraciones, el consejero de Empleo del Gobierno de Gasteiz, Ángel Toña, mostró su satisfacción por el aumento interanual de la afiliación, «que no se había producido desde el año 2008».

Pese a considerar que estos datos indican una «recuperación importante del empleo», matizó que es necesario estar atentos a economías como la francesa o la alemana, ya que «su evolución no es tan positiva como queremos y podría incidir en una evolución más ralentizada para nosotros».

En el Estado español, el paro descendió de forma más moderada, un 0,65%, lo que sitúa el número de parados en 4,14 millones de personas. El ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró que la economía en el cuarto trimestre está teniendo un mejor comportamiento que el tercer trimestre de este año.