Mikel CHAMIZO
CLÁSICA

En tierra de nadie

No se me ocurre terreno más resbaladizo dentro el panorama musical que aquel que transita desde la música pop a la tradición clásica. La lista de artistas de uno u otro ámbito que han incurrido puntualmente en el otro lado es inacabable, y por eso mismo resulta aún más significativa la escasez de resultados memorables entre tal cantidad de experimentos. Los compositores clásicos tiene problemas para entender los códigos estilísticos y performativos de la música popular, y los autores populares no suelen alcanzar la complejidad formal y retórica que caracteriza a las obras de tradición clásica.

Joserra Senperena se queda en esa tierra de nadie con su  nuevo disco, “9 ganbara pieza”, presentado el viernes en Tolosa. Se percibe el esfuerzo por proponer armonías ricas y combinaciones contrapuntísticas que aporten interés al desarrollo de estas piezas de 5 minutos –lo habitual en una obra de cámara ronda entre los 15 y los 45–, pero el escaso idiomatismo en el uso de los instrumentos, la simpleza del trabajo rítmico y el planteamiento formal demasiado básico las hacen de limitado interés para aquellos acostumbrados a escuchar las músicas de Beethoven, Debussy o Britten. Hubo, desde luego, momentos muy interesantes en los trios 4 y 9, y especialmente al final de la “Segunda pieza de cámara”, donde Senperena rompió con las cadenas de la armonía académica para proponer una abstracción musical tímbricamente hechizante. Por desgracia, el resto de la propuesta quizá funcionaría mejor como banda sonora que como música capaz de protagonizar por sí misma todo un concierto de 90 minutos.