Alex Txikon ha instalado ya el campo base, donde pasó la Nochevieja, para intentar subir al Nanga Parbat (8.126 metros), tras no lograrlo el año pasado, en la que sería la primera ascensión invernal a esta cumbre.

En el Nanga, uno de los dos únicos ochomiles, junto al K2 (8.611 m), jamás escalados en invierno, la expedición de Txikon afrontará el reto siguiendo la ruta Kinshofer de la vertiente Diamir. Txikon, con diez ochomiles en su haber, tuvo que desistir el invierno pasado de lograr la cima del Nanga a tan solo tres horas para la cumbre, debido a un error de orientación. A su vuelta, confesó que tenía «un cabreo monumental» por la oportunidad perdida.

Así que ha regresado este año, por la misma vía y con los mismos compañeros: el paquistaní Ali Sadpara y el italiano Daniele Nardi, con los que está ya en el campo base. Los cálculos son que la expedición se prolongue hasta bien entrado febrero.