NUMANCIA 0

ALAVÉS 1

«Cada partido es distinto, casi nunca se repite el guión», aseguraba José Bordalás en la sala de prensa de Los Pajaritos. Y, efectivamente, el Alavés cambió ayer para optar por el guión de un thriller, que mantuvo a los espectadores pegados a sus asientos hasta que Sergio Llamas ejerció de héroe en los últimos instantes.

De héroe salvador. Porque el final de la historia fue tan feliz como lo viene siendo en los últimos tiempos para los albiazules, que han conquistado 22 de los 24 últimos puntos que han disputado. Anoche se hicieron con su cuarta victoria consecutiva, que refuerza el liderato gasteiztarra, a la espera de que la mayoría de sus perseguidores –el Alcorcón fue el único que jugó ayer y ganó–, ahora más presionados, jueguen hoy.

El triunfo llegó cuando más complicado se veía. Porque el Alavés fue muy superior en el primer tiempo pero el empuje del Numancia le hizo perder terreno en la reanudación. Antes de que los locales espabilasen, el equipo de José Bordalás había llevado la batuta. A los dos rivales les costó llegar con claridad al área pero los albiazules lo hicieron más y mejor. Faltó, sin embargo, definición en los últimos metros, bien para asistir, bien para rematar. Lo peor, además del 0-0 con el que llegaba el marcador al descanso, fue la retirada de Toquero. Con un fuerte golpe en el cuádriceps –Bordalás explicó que incluso se habían asustado, viendo la inflamación–, y a la espera de los resultados de las pruebas, el gasteiztarra se quedó en el vestuario en la reanudación.

Un segundo tiempo en el que el Numancia se fue viniendo arriba. No se veía demasiado lejos la posibilidad de que la racha alavesista acabase en Soria. Pero esta parece la temporada de un Alavés que, incluso cuando peor lo pasa, es capaz de brillar. A siete minutos del final, Juli sirvió desde la derecha para que Sergio Llamas, que había saltado al verde un cuarto de hora antes, anotara el gol del triunfo.

Cautela

Encantado se reconoció Bordalás por ganar un partido «muy complicado y muy importante» pero se atuvo a su discurso. «Sabemos qué es el fútbol, cada jornada vemos resultados sorprendentes. Es verdad que ganar siete partidos de ocho es difícil y tiene muchísimo mérito pero tenemos que tener mucha cautela. Queda un mundo y hay mucha igualdad», recalcó.