Jota Peleteiro ya ejerce de azulgrana. Tras completar su primer entrenamiento a las órdenes de José Luis Mendilibar, el gallego compareció ayer junto al presidente del Eibar Álex Aranzabal y el director deportivo azulgrana Fran Garagarza. Satisfacción e ilusión por repetir la buena experiencia de la anterior etapa como armero del atacante fueron el denominador común de sus discursos.

«Estoy muy contento, muy ilusionado de volver. Esta fue mi casa y tenía la espinita de jugar con el Eibar en Primera», aseguró Jota, que no ha olvidado su paso por Ipurua, cuando fue una de las piezas fundamentales en el ascenso a Primera. «Fue un gran año en lo personal y en lo colectivo», subrayó, de ahí que cuando comenzó a estudiar la opción de regresar a la Liga, para lo que contaba varias ofertas, «desde el primer momento sabía que quería estar en el Eibar. Y cuando un club te quiere y tú quieres ir a ese club, acabas llegando a un acuerdo», aseguró. En este caso una cesión hasta 2017, aunque el Brentford, que la próxima campaña tiene la opción de prolongar el contrato del gallego hasta 2018, se reserva la opción de repescarlo en los dos próximos mercados, verano de 2016 e invierno de 2017.

El jugador, que asegura haber encontrado un club «más grande» que el que dejó y un vestuario «similar, aunque haya mucha gente nueva», admitió que ahora le toca «ganarse un puesto» en el equipo. «Voy a darlo todo y pelear cada día. El equipo va muy bien y aunque yo sé que puedo ser una pieza importante, me lo tengo que ganar como cualquier otro», insistió.