Natxo MATXIN
REAL

Todo cambió con el gol de Zamora

Desde que la escuadra txuri urdin consiguiese su primera liga en El Molinón, el estadio astuariano se ha convertido en muy propicio.

Hasta finales de los 70, El Molinón era un campo prácticamente inexpugnable para la Real. Dos victorias y otros tantos empates eran el raquítico bagaje que acumulaba la escuadra txuri urdin en la veintena de visitas que había realizado hasta ese momento. Tuvo que ocurrir un hecho capital para que variase tan negativa dinámica.

Bien es verdad que una temporada antes, en la 79-80, el conjunto guipuzcoano volvió a ganar en el feudo rojiblanco, pero lo que realmente marcó un antes y un después fue el gol que consiguió Jesús Mari Zamora en aquel histórico 26 de abril de 1981. Una diana que abrió de par en par las puertas del éxito en los ochenta, con la consecución de otro título liguero al año siguiente –además de la Supercopa–, junto al torneo del K.O. en su edición de 1987.

También a partir de ahí, El Molinón, que la Real volverá a visitar este viernes después de cuatro años y medio sin hacerlo, se transformó en un estadio que ha dado más alegrías que disgustos a los seguidores txuri urdines. En otras veinte ocasiones más –todas en Primera, menos una–, que son las que se han producido desde aquella celebración liguera en el feudo asturiano, únicamente en una cuarta parte de ellas el cuadro vasco se ha marchado de vacío, la última en la 2007-08, cuando se perdió por la mínima por un gol del delantero croata Bilic.

El resto, todo han sido satisfacciones, con nada menos que nueve victorias, dos de ellas en los últimos desplazamientos a Gijón. En la 2010-11 se venció remontando por 1-3, gracias a los goles de Xabi Prieto, Zurutuza y Aranburu, que le dieron la vuelta al tempranero tanto del defensa Gregory. Apenas nueve meses después, en la 2011-12, el marcador fue más ajustado (1-2), con dos dianas de Agirretxe. Seis empates completan la magnífica estadística txuri urdin de las últimas tres décadas en El Molinón.

Video y puerta cerrada

Tras descansar en la jornada del lunes, la plantilla regresó ayer a los entrenamientos en las instalaciones de Zubieta para preparar el encuentro que la Real disputará contra el Sporting el viernes a las 20.30. Para empezar el trabajo, los jugadores tuvieron una sesión de video y posteriormente el equipo se ejercitó a puerta cerrada en el campo z7.

Faltaron Carlos Martínez, con una rotura de fibras; Agirretxe, en el último tramo de su recuperación del esguince de tobillo; Zurutuza, que no termina de superar su lesión muscular; y Canales, en rehabilitación tras su grave operación de rodilla.

Héctor: «Eusebio me ha transmitido más confianza y minutos»

Apenas ha jugado una hora entre Liga y Copa, pero Héctor Hernández está ahora contento porque todos esos minutos han llegado con el relevo en el banquillo. «Eusebio me ha transmitido más confianza y ello se ha traducido en presencia en el campo. Ello me hace tener más ganas de trabajar».

No obstante, el vallisoletano podría ser uno de los jugadores que saliese en calidad de cedido para disponer de más oportunidades y formarse. «Sé que hay equipos que han preguntado por mí y estoy a disposición del club. Si la Real decide que me tengo que marchar para ganar en experiencia, estaré encantado de hacerlo», manifestó el joven futbolista.N.M.

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