Bengoetxea VI y Untoria sumaron su quinto triunfo en el frontón Bizkaia de Bilbo tras derrotar 22-17 a Víctor y Beroiz, por lo que asientan todavía más su cuarta plaza en la liguilla de cuartos del Campeonato de Parejas. Un arreón final de Oinatz Bengoetxea, al que le salió bien su apuesta por arriesgar pese a tener las manos justas, acabó decidiendo un encuentro duro, largo y peloteado.

De hecho, los cinco tantos de diferencia que registró finalmente el marcador a favor de colorados fue la máxima renta de todo el partido, en el que se registraron varios empates y el agujero apenas pasaba de los dos tantos. No obstante, y tras el empate a 17, Oinatz cogió las riendas de su pareja y decantó la balanza apoyándose en el saque. Un tanto de saque-remate (19) y otro de saque directo (20) empezaban a mostrar el camino a la victoria, que certificaba el de Leitza por la vía rápida.

En el primer partido, cabe destacar que Cecilio Valgañón reapareció con victoria tras cuatro meses en el dique seco por mal de manos. El zaguero de Ezcaray jugó con Aitor Mendizabal y se impusieron por 13-22 a Julen Retegi y Julen Urruzola.

Doble ración de emociones

La novena jornada prosigue hoy con doble ración. Los focos estarán, sobre todo, en el Ogeta de Gasteiz, donde, con todas las entradas vendidas, Xala intentará hacer olvidar la baja de Juan Martínez de Irujo en el duelo por el liderato. El delantero de Lekuine repite como suplente, y espera hacerlo con más éxito que hace dos semanas, cuando suplió a Irribarria y perdió 9-22 con Miguel Merino contra Artola y Albisu. A su favor que, pase lo que pase, el billete para semifinales de Irujo-Rezusta parece asegurado con sus siete triunfos en ocho jornadas. En frente, Olaizola II y Urrutikoetxea tienen la oportunidad de alcanzarles en la tabla y dejar el suyo prácticamente cerrado.

El otro choque de la jornada se juega en el Igarondo de Idiazabal, que celebra las fiestas de San Blas con el partido de “guipuzcoanos” entre Altuna III-Merino II y Artola-Albisu. Los primeros, con solo dos triunfos en ocho partidos, agotan ya sus últimas oportunidades para pelear por el billete a semis, mientras que los segundos pueden dejarlo muy encarrilado.