Después de 40 años todavía quedan muchos pasos por dar para que el reconocimiento de las víctimas del 3 de Marzo sea efectivo. Así lo advirtió ayer Nerea Martínez, sobrina de Pedro Mari Martínez Ocio, uno de los cinco obreros abatidos por la Policía Armada en el barrio de Zaramaga. «Debemos avanzar para que se reconozca la verdad de lo ocurrido, para que se haga justicia y se juzgue a los responsables; para que se garantice el cumplimiento de la legislación internacional; y para que la generación de mis hijas pueda vivir en una sociedad en la que no se vulneren los derechos humanos, como se sigue haciendo en el Estado español», señaló ante los asistentes a una recepción organizada por la Diputación a los miembros Martxoak 3.

Visiblemente emocionada, indicó que la recepción no solo es a las víctimas, es «a todo el pueblo de Gasteiz, a las voces que nunca han callado y han reclamado verdad, justicia y depuración de responsabilidades». «Gasteiz no olvida los muertos. Y la memoria de Pedro María Martínez Ocio, Francisco Aznar, Romualdo Barroso, José Castillo, Bienvenido Pereda, Juan Gabriel Rodrigo y Vicente Antón –los dos últimos fallecidos en las protestas convocadas en los días posteriores al 3 de Marzo en Basauri y Tarragona– continúa viva», añadió.

En el mismo acto, el diputado general, Ramiro González, afirmó que las instituciones tienen el deber de mantener viva la memoria de las víctimas de la violencia policial, que han padecido «un sufrimiento doble: el olvido y el desamparo». En este sentido, recordó que el Ejecutivo autonómico ha elaborado un decreto para reconocer a las víctimas provocadas por la violencia de motivación política entre 1960 y 1978, y avanzó que ya trabaja en otra norma para reconocer a las víctimas de la «represión ilícita» entre 1978 y 1999.

Cambio de recorrido

Antes de la recepción, ELA, LAB, ESK y Steilas anunciaron la celebración de una manifestación el próximo jueves, 3 de marzo. Este año cambiará el recorrido de la marcha ya que, en vez partir de Zaramaga, como viene siendo habitual, arrancará a las 19.00 desde la plaza de la Virgen Blanca y finalizará en la plaza del 3 de Marzo, donde se tributará un homenaje a las obreros fallecidos en 1976. Además de recordar lo ocurrido hace 40 años, las centrales sindicales mostrarán su rechazo a la precarización del mundo laboral. «La situación que se vivía en aquel momento era muy mala, había mucha explotación, pero hoy la sociedad no esta en una situación mucho mejor. La sociedad se tiende a fragmentar, a precarizar, y las siguientes generaciones no tienen garantizado un futuro mejor», subrayó Ignacio Funes, del sindicato ESK.

En este sentido, el representante de Martxoak 3, Andoni Txasko, insistió en que «es tan importante recordar a las personas que murieron, como retomar la lucha que llevaron a cabo en aquel momento». «Hay que recuperar el espírity y la solidaridad que caracterizó al 3 de Marzo», concluyó.