Alfontso DIEZ

Y de regreso, más alto

El astronauta estadounidense Scott Kelly, que el miércoles regresó a la Tierra junto al ruso Mikhail Kornienko a bordo de una cápsula Soyuz tras pasar 340 días en la Estación Espacial Internacional (EEI), es ahora mismo cinco centímetros más alto que hace un año. Así se lo ha confirmado el portavoz de la NASA Jeff Williams a la cadena CNN, aunque matizando que se trata de un efecto esperado y «es temporal».

«Los astronautas crecen en el espacio porque la columna vertebral se alarga; pero en cuanto vuelven a la Tierra, en poco tiempo se restaura su altura original», ha explicitado Williams. Sin la presión constante que ejerce la gravedad sobre ellos, los discos intervertebrales se pueden expandir y provocar así el crecimiento de la espina dorsal.

La publicación de este dato se enmarca en las pruebas que está llevando a cabo la NASA con Kelly desde hace un par de años –y que se prolongarán otro año más, por lo menos– para conocer cómo reacciona el cuerpo humano en los vuelos espaciales de larga duración. Los resultados que se obtengan ayudarán a diseñar futuras misiones más allá de la órbita baja terrestre.