Desde hace más de una década, el Eibar ha tenido que pelear hasta el último día de competición por su objetivo, ya fuera la salvación, el ascenso o la clasificación para el play-off. Ahora, con la permanencia a punto de caramelo y la clasificación europea ciertamente complicada, corre el «riesgo» de enfrentarse a un final de temporada sin objetivos definidos.

Siempre hay, sin embargo, alguna pelea en la que meterse. O al menos eso opina Dani García, según el cuál el equipo «no bajará los brazos» en ningún caso. «Hemos hablado en el vestuario –explicó en Radio Marca Eibar–. Sabemos que Europa es muy difícil pero aspiramos a quedar lo más alto posible. Nos gustaría que fuera entre los diez primeros y cuanto más arriba mejor, por el bien de todos». En este sentido, el capitán armero insistía en que «cada uno, los jugadores y el club, se juega mucho también después de conseguir la permanencia. Los que tienen contrato para hacerse valer en un puesto titular, los que no tienen contrato para ganarse la renovación o un contrato con otro equipo, el club porque cuanto más arriba acabe mayores serán el año que viene los ingresos por televisión... Todos nos jugamos algo, no creo que bajemos los brazos», insistió.

Aunque el primer paso será conseguir los puntos –en principio tres o cuatro más– que aseguren la permanencia. Algo que no ofrece dudas al centrocampista guipuzcoano, «aunque algunos parecen querer que repitamos lo del año pasado porque no hago más que escuchar que nos va a pasar lo mismo». Lo cierto es que, pese al bajón de la segunda vuelta, la situación es muy diferente a la de hace un año, tanto por la ventaja que mantienen los azulgranas respecto a descenso –diez puntos, el doble de la temporada pasada a estas alturas–, como por las propias sensaciones que ofrece el equipo.

Dani García, además, confía en que el Eibar remonte, una vez que la enfermería empieza a perder pacientes. «Todos los equipos notan las bajas. Y nosotros hemos tenido lesionados cada día –recordó–. Y no solo un jugador, han sido muchos. Ahora se ve que la enfermería está bajando y cuantos más estemos, mejor para el míster, que tendrá más para elegir, y para nosotros, porque habrá más competitividad. Sobre todo ahora que se empieza a notar el cansancio de todas las jornadas que se han jugado ya, es importante que vaya entrando más gente y que se pueda refrescar el equipo».

Mejoría

No son pocos los futbolistas que podrían regresar el viernes en Getafe. El Eibar reanudó ayer los entrenamientos y Pantic, Luna, Keko y Jota trabajaron con el grupo. Aún es pronto para saber si estarán disponibles pero los cuatro podrían llegar a tiempo para, cuando menos, entrar en la convocatoria. No es el caso de Lillo, que sigue con su recuperación, ni de Ekiza, que hoy será operado en Munich. Las pruebas confirmaron ayer que sufre una «sport hernia» –similar a una hernia inguinal–, como la que ya le obligó a pasar por el quirófano en verano, pero en este caso en la pierna derecha.

Mejor aún puede ser la semana, en ese sentido, para Fran Escribá, que puede recuperar hasta a media docena de jugadores para el choque, calificado ayer como «la primera final de la temporada» por Álvaro Vázquez. Y no es para menos. La victoria del Granada ante el Espanyol en la noche del lunes ha metido en descenso al Getafe, que es el peor equipo de la segunda vuelta. En estos diez partidos solo ha sido capaz de sumar cuatro puntos.