Arnaitz GORRITI
NBA

Solo Kobe Bryant hace sombra al 73-9

La «mamba» se despedía con 60 puntos yvictoria sobre Utah, mientras que los Warriorsestablecían el récord de triunfos al vapulear alos Grizzlies a triples. Los de Oakland certificansu condición de favorito para llevarse el anillo.

California es donde están los estudios de Hollywood, y como si de un guión expresamente diseñado fuera, la traca final de la Liga Regular de la NBA 2015/16 vivió una partida múltiples de magia y ensueño. Por un lado, los Golden State Warriors alcanzaban el deseado 73-9, por encima de los Bulls de 1996, tras vapulear por 125-104 a los Mem- phis Grizzlies. Por el otro, el Staples Center vivía el adiós de Kobe Bryat por todo lo alto: 60 puntos para la «mamba» y triunfo de los Lakers ante Utah Jazz por 101-96.

Si la marca de los Warriors fue histórica, no lo fue menos la despedida de Kobe Bryant. Sus últimas 24 horas como jugador profesional tuvieron el seguimiento continuo de varias cámaras, mientras que el Staples Center se llenó de personas que dirán «yo estuve allí», capaces de pagar hasta 22.500 dólares por una entrada en primera línea, amén de familiares, amigos y hasta «enemigos» de Kobe, como el mismísimo Shaquille O’Neal. Nadie estaba dispuesto a perderse el adiós de uno de los jugadores clave de las dos últimas décadas de la NBA. Tampoco el propio Kobe Bryant.

Afectado por varias lesiones en el tendón de Aquiles, las dos últimas campañas de la «mamba» han sido una calamidad. La propia franquicia de los Lakers decidía dar por perdidas estar temporadas para, de a poco, liberarse de los salarios más sangrantes –primero fueron Nash, Dwight Howard o Pau Gasol; después el propio Kobe– y empezar de nuevo a partir del draft del próximo 23 de junio.

Por eso no extrañó que los Lakers, que terminan esta campaña con su peor balance, 17-65, perdieran 44-57 al descanso, pese a los 22 tantos de Bryant. Y ni añadiendo 15 más lograba la «mamba» arrimarse en exceso a unos Jazz que, pese a dominar el duelo, conocían que no tendrían sitio en los play offs, ya que los Rockets se habían asegurado un puesto en la postemporada.

Faltaba la traca final. El Staples Center se puso en pie ante los 23 puntos más, para un total de 60 –lanzando 50 de los 85 tiros de su equipo; 21 de los 25 triples lanzados por los Lakers–, con un minuto final de apoteosis: triple a 59 segundos para establecer el 95-96, y suspensión larga para voltear el partido, 97-96 a 31 segundos del final. Dos tiros libres y una asistencia para el mate de Jordan Clarkson cerraban el 101-96 final, y una carrera de 20 años, cinco anillos, 18 presencias en el All Star, MVP de la temporada 2007/08 y de las Finales de 2009 y 2010, siempre ligado a los Lakers.

«Nunca imaginé que este día pudiera llegar», reconocía el ya exjugador. «Siempre os tendré en mi corazón. Desde el fondo de mi corazón, gracias. Os quiero», remachaba Kobe Bryant.

Récord y descanso

Nadie hasta la campaña 2015/16 había anotado 300 triples en una sola temporada. Stephen Curry, tras meterle 10 a los Memphis Grizzlies, sumaba la friolera de 402, con un acierto del 45%. Los Golden State Warriors tenían la oportunidad de superar el mejor balance de Liga Regular, y a fe que lo consiguieron: 125-104 ante unos «ositos» que, por culpa de las bajas, bastante han hecho con colarse en la postemporada.

Steve Kerr, aunque parezca mentira, pudo sentar todo el cuarto período a Curry –y aún así le dio tiempo para anotar 46 puntos– Klay Thompson, Iguodala o Bogut, porque con el encuentro ya finiquitado al descanso, 70-50, había que empezar a pensar en los play offs, que arrancan a partir del sábado. Hasta Michael Jordan y Barack Obama enviaron sus felicitaciones por el histórico récord de la franquicia californiana.

Stephen Curry quiere más

«72-10 sin el anillo no significa nada» –en inglés, y rimando–, fue el lema que se inventó Ron Harper para los play offs de 1996. Los Bulls, tras arrasar en la Liga Regular, hicieron otro tanto en la postemporada. Y es lo que buscan los Warriors.

«Lo mejor que podemos hacer es ver que esto no ha terminado y seguir trabajando para mejorar», declaraba Stephen Curry tras el 73-9. «Ya la pasada temporada vimos que podemos ganar el anillo, pero eso no significa que este año vaya a ser igual», advertía.

En rigor, solo los San Antonio Spurs parecen en disposición de hacer saltar la banca, mientras que Cleveland parece el candidato a ganar en el Este, mientras que habrá que ver si Toronto es capaz de dar un paso adelante en play offs, o si Atlanta, Clippers o Miami pueden dar algo de vidilla a la postemporada.

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