Ipurua acoge esta noche uno de los últimos grandes partidos de la temporada. O al menos eso espera el Eibar, que quiere evitarse apuros en las jornadas finales y concentrar las emociones, precisamente, en el derbi. De ahí que, al menos para los azulgranas, haya algo más que la honrilla en juego.

Aunque posiblemente el de la rivalidad acabe siendo el mayor acicate, porque, con 38 puntos, un colchón todavía de diez, y seis jornadas por delante, no parece que el equipo de José Luis Mendilibar vaya a sufrir demasiado para asegurarse la permanencia. Qué decir de la Real, con la Europa descartada salvo carambola impensable y la tranquilidad, que tanto envidia ahora su anfitrión, asegurada tras las dos últimas victorias.

Lo cierto es que ambos equipos llegan a Ipurua en un pañuelo, apenas tres puntos de ventaja para los visitantes, pero en momentos absolutamente contrapuestos. Mientras los donostiarras viven su particular primavera con los alegrones de las dos últimas jornadas, no hay manera de acabar con la hibernación armera. Ocho jornadas han pasado ya desde que el Eibar, el segundo peor equipo de la Liga en esta segunda vuelta, celebrara su último triunfo. Ocho jornadas de las que es difícil destacar algo más que su primer tiempo frente al Villarreal y la reacción que protagonizó en Getafe tras el tempranero gol de los azulones.

El enésimo que recibe de forma similar en los últimos tiempos el cuadro eibarrés, que precisamente basó buena parte de su espectacular primera vuelta en los arranques arrolladores. Otro aspecto en el que el encuentro de Ipurua puede suponer un choque de trenes, teniendo en cuenta cómo se han fraguado los dos últimos triunfos de la Real, y al que en el bando azulgrana se le ha concedido gran relevancia esta semana.

No es fácil adelantar con qué hombres intentará acabar con la mala racha Mendilibar, que bien podría dar continuidad al once que tan bien lo hizo en la primera parte frente al Villarreal, con Bastón y Enrich pugnando por la punta de ataque. Aunque también podría adoptar una postura «salomónica» con sus arietes y alinear a ambos de inicio, una fórmula muy de su gusto, pero que no ha aplicado desde la visita del Barcelona. Y estuvieron entonces escoltados por los cuatro pivotes de la plantilla, algo que en ningún caso sucederá frente a la Real.

Por parte txuriurdin, también Eusebio podría apostar por los mismos once jugadores que se enfrentaron de inicio al Barcelona, aunque tampoco son descartables las entradas de dos exarmeros, Yuri y Markel, por De la Bella y Granero.

El órdago a la grande de la plantilla azulgrana

José Luis Mendilibar sí ha decidido enfocar desde otro punto de vista la recta final de la temporada, en lo que viene a suponer una suerte de órdago a la grande.

Y es que, según explica el técnico azulgrana, «hasta ahora hemos estado que si la salvación, la salvación... y mirando más a lo que hacían los rivales que a lo nuestro. Así que después del Bernabéu les dije a los jugadores que, aunque no sea matemático, ya que la permanencia está cerca, nos teníamos que poner otro objetivo. Y lo que vamos a hacer es pensar que queremos acabar la temporada con 45 o 46 puntos, para que una temporada que había sido tan buena no acabe mal. Y para eso tenemos que pensar más en lo nuestro y menos en lo de los demás».

En lo que respecta al derbi, asume que la Real llega en plena racha, pero confía en que se cumpla el tópico y «no importe tanto en qué momento está cada uno y sea un partido diferente».A.U.L.

Markel Alberdi realizará el saque de honor

Markel Alberdi realizará el saque de honor en el encuentro de esta noche en Ipurua. El nadador eibarrés acaba de regresar de una concentración con la selección española, con la que buscará en el Campeonato de Europa de Londres del próximo mes de mayo una plaza en los Juegos de Rio.

Una jornada repleta de actos en Eibar

Más allá de lo que ofrezcan Eibar y Real a partir de las 20.30, el ambiente está asegurado en la localidad armera durante todo el día. Los hosteleros, la empresa Kirolbet y Eskozia la Brava han organizado numerosas actividades, que arrancan a mediodía en Untzaga.