Jon ORMAZABAL
PAREJAS DE PALA

Brefel contagia entusiasmo

Fusto y el francés se hacen con las txapelas en una final disputadísima y con gran ambiente en Mungia.

FUSTO-BREFEL 3

GAUBEKA-IMANOL 2


Podólogo de profesión en la localidad francesa de Belberaud, cerca de Toulouse, Sylvain Brefel realiza cerca de 1.000 kilómetros para disputar cada uno de sus partidos de pala, algo que requiere de un entusiasmo inquebrantable y que el zaguero ha sabido contagiar al mundo del leño, tan necesitado de estímulos. Profesional tardío, Brefel encontró ayer en Mungia el premio a tanto sacrificio y lo hizo además en una final que debe servir como estímulo.

Y es que, la epopeya del zaguero francés difícilmente hubiera podido tener un desenlace más acorde, con una gran final que puso la guinda a un campeonato en el que los organizadores se la jugaron pero en la que también han obtenido su valiosa recompensa, con la aprobación de todos los implicados.

Gran final

Porque suele resultar complicado que las finales respondan a la espectativa suscitada en la previa, pero la de este Parejas no dejó insatisfecho a nadie. Quizá a Gaubeka-Imanol, cuyo gran esfuerzo se volvió a quedar sin recompensa, pero que pudieron terminar satisfechos con la ovación de un público entregado.

De inicio, lograron los vizcainos desactivar a Fusto, pero ni eso ni que Brefel cometiera dos faltas de saque fueron suficientes para que los colorados se hicieran con un primer set muy igualado por 10-8. La final ganó en intensidad y calidad en cuanto los pelotaris entraron en calor y la pareja vizcaina les devolvió el resultado en el segundo set, probablemente el mejor jugado de todo el partido.

Los colorados volvieron a adelantarse en una tercera manga en la que Imanol pareció venirse abajo con tres faltas de saque 10-6. El golpe fue duro y todo parecía perdido con 3-7 en el cuarto, pero el de Bilbo se rehizo para forzar un agónico quinto set (7-10), en el que los pequeños detalles decidieron el título para la pareja extranjera.