Los participantes en la caravana colocaron en sus vehículos carteles en los que exigían la gratuidad de la autopista, y algunos de ellos también los mostraron a través de las ventanillas de los coches.

La caravana, que partió poco antes del mediodía desde Iurreta, realizó una reivindicación «de forma pacífica, festiva y sin colapsar la autopista», tal como habían anunciado los organizadores de este acto durante la convocatoria realizada el pasado viernes.

«Está totalmente amortizada»

El objetivo de este acto, tal como señalaron desde la plataforma ‘‘AP-8 Peajerik ez’’, era mostrar el «hartazgo» con el peaje de «la única vía rápida y segura que disponen muchas personas para comunicarse con la capital de Bizkaia».

Según explicaron, esta infraestructura «está totalmente amortizada desde el año 2003, en el que fue entregada la autopista a la Diputación Foral de Bizkaia a coste cero y, por lo tanto, resulta anacrónico seguir cobrando por su utilización».

A este respecto, constataron que los vecinos del Duranguesado y Lea Artibai se sienten «discriminados» por la Diputación de Bizkaia, «dado que a fecha de hoy tienen que seguir pagando peaje para desplazarse desde su comarca hasta Bilbo».

Mil euros anuales de coste

Según el cómputo realizado por la plataforma ‘‘AP-8 Peajerik ez’’, esta situación de «discriminación» conlleva que los habitantes de estas comarcas tengan que pagar más por el uso de la autopista que el resto de los habitantes de Bizkaia.

«Se ven en la obligación de detraer de sus salarios unos 1.000 euros anuales para pagar los peajes. Esto solamente se puede entender –según dicha plataforma– como un impuesto añadido para con los habitantes de las comarcas afectadas».

A su juicio, el cobro del peaje en la AP-8 provoca que esta autopista esté «infrautilizada», mientras que, por la contrario, la carretera N-634, que discurre paralela a ella, esté «prácticamente colapsada».

«Para las personas que no disponen de suficiente dinero como para permitirse el lujo de pagar el peaje establecido por la Diputación foral, y que por lo tanto tienen que usar la carretera, las posibilidades de sufrir un accidente se disparan, con lo que ello conlleva de drama personal y social», informaron los miembros de dicha plataforma, que no descartan nuevas acciones si la Diputación de Bizkaia sigue manteniendo los peajes.