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brasilia
JUICIO POLÍTICO A LA PRESIDENTA BRASILEñA

La denostada derecha copa el Gobierno tras tumbar a Rousseff

El Senado de Brasil consumó ayer la destitución temporal de Dilma Rousseff, sustituida en la Presidencia por Michel Temer, líder del PMDB, formación de derecha que asume por tercera vez la Jefatura del Estado sin haber ganado nunca unas presidenciales. Rousseff restó legitimidad al nuevo Gobierno y aseguró que está en juego «el futuro de Brasil».

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff será finalmente sometida a juicio político acusada de «maquillar» las cuentas públicas. Tras más de veinte horas de debate, el Senado acordó dar inicio al proceso y apartarla del cargo por un período de hasta 180 días, tiempo máximo de investigación, que concluirá con una nueva votación, y durante el cual será sustituida por el vicepresidente, Michel Temer, que ayer mismo asumió de forma interina la Jefatura del Estado y presentó el nuevo Ejecutivo, integrado por nueve partidos de derecha y centroderecha y 24 ministros, todos hombres.

La decisión ha colocado de nuevo en el sillón presidencial al PMDB, que asume por tercera vez la Jefatura del Estado sin haber vencido nunca unos comicios presidenciales pese a su gigantesca fuerza, ya que cuenta con el mayor número de gobiernos regionales y municipales. Temer, vicepresidente de Rousseff en 2010 y en 2014 en tanto que líder del PMDB, será el tercer vicepresidente de su formación en asumir la Presidencia.

El PMDB, con el 1% de apoyos, integra a grupos de diversas ideologías y caciques en todas las regiones y las rivalidades internas dificultan la elección de un candidato presidencial.

Frío, calculador y con gran experiencia política pero ningún carisma, Temer, de 75 años y respaldado por los mercados, ha sabido aprovechar el poder que tejió entre bastidores para saltar a la Presidencia, aunque solo cuenta con un 3% en intención de voto, según las encuestas.

El presidente interino se sentía ignorado por Rousseff. Ahora tendrá que esquivar una amenaza de juicio político, presenta- da por motivos similares a los aducidos contra la presidenta.

«Guerrera de la patria»

Dilma Rousseff abandonó el Palacio de Planalto arropada por sus ministros y colaboradores cercanos y por miles de seguidores del Partido de los Trabajadores (PT) y de movimientos sociales que coreaban «Dilma, guerrera de la patria brasileña».

Tras ser suspendida –por 55 votos contra 22 y cuatro abstenciones–, dijo que jamás pensó que tendría que luchar de nuevo contra un golpe de Estado. Afirmó que en el juicio político al que será sometida no estará en juego su mandato, sino «el futuro de Brasil», y tras denunciar que ha sido castigada por un crimen que no ha cometido, llamó a sus seguidores a «mantenerse movilizados, unidos y en paz».

«Lo que más duele es la traición y la injusticia», dijo Rousseff, que restó legitimidad al nuevo Ejecutivo y habló como presidenta electa por los 54 millones de votos logrados en su reelección en 2014.

La decisión del Senado es solo el primer paso de un engorroso trámite que puede durar meses y que concluirá con la destitución definitiva o la recuperación del cargo por parte de Rousseff tras una nueva votación en el Senado en una sesión que, al término de la investigación, estará dirigida por el presidente de la Corte Suprema.

 

El PT llama a la resistencia frente el nuevo Ejecutivo

El PT llamó a la movilización y resistencia al «ilegítimo» Gobierno de Michel Temer y aseguró que la apertura de juicio político contra Dilma Rousseff «es la continuidad del golpe contra la democracia y la Constitución». Según su presidente, Rui Falcão, «una vez más, la élite pisotea el voto, abriendo el camino a la imposición de un Gobierno ilegítimo». Indicó que el país ha sido «asaltado por los peores exponente del poder, la monopolizada prensa y la plutocracia». «Incapaces de vencer en las urnas, recurren a la farsa institucional para derribar a una gobernante elegida por la mayoría del pueblo y que no cometió ningún crimen», añadió. La derrota ante «las fuerzas de la infamia, la traición y el golpismo será respondida redoblando el ánimo de combate por la restauración constitucional y la absolución de la presidenta».GARA