GARA
BILBO

Trabajadoras de la limpieza exigen un convenio a las subcontratas y a Lakua

Es un colectivo integrado por 1.600 trabajadores, mayoritariamente mujeres, que realiza la limpieza de los centros públicos del Gobierno de Lakua y de la UPV-EHU. El pasado 31 de diciembre finalizó la vigencia de su convenio. Y no quieren esperar más para renovarlo.

Los campus de la UPV-EHU en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa fueron escenario ayer de las movilizaciones llevadas a cabo por las trabajadoras y trabajadores que se encargan de limpiar, casi diariamente, la mayoría de las instalaciones del Gobierno autonómico y de la UPV-EHU. No obstante, estas 1.600 personas no son empleadas de la Administración, sino que integran las distintas plantillas de las empresas subcontratadas.

Además, desde que se inició el año no tienen el paraguas de un convenio sectorial, pese a que los sindicatos con representación en el sector –ELA, 40,24%; UGT, 24,39%; LAB, 13,41%; ESK, 10,98%; y CCOO, 10,98%– han realizado numerosos intentos para alcanzar un acuerdo y seguirán «manteniendo todas las reuniones de negociación necesarias», según reiteraron en su convocatoria. También han pedido cita a la UPV-EHU y al Departamento de Educación.

No obstante, los sindicatos consideran que las empresas «se ven fuertes y quieren imponer su modelo de precariedad», que incluye, entre otros puntos, congelación salarial –desde 2009 la pérdida del poder adquisitivo ha sido de un 8,4%–, temporalidad –con contratos parciales «que traen consigo salarios de miseria y fuertes cargas de trabajo»–, falta de sustituciones y denegar vacaciones.

En el caso de la limpieza de los centros educativos, resaltaron que el Gobierno de Iñigo Urkullu ha recortado el presupuesto respecto al año 2012 «y ha mirado a otro lado cuando las empresas han tirado los precios, adjudicándose el servicio entre un 10% y un 20% del precio de salida.

«Las empresas mantienen sus beneficios y la Administración recorta el presupuesto a costa de la precariedad laboral de las trabajadoras y trabajadores del sector», sentenciaron. Y dejaron una advertencia en este final de curso: «En caso de que las empresas mantengan su negativa a negociar, la vuelta de vacaciones será caliente, con endurecimiento de las movilizaciones».

Huelga en Bellas Artes

Otros servicios subcontratados son los que tiene asignados la empresa Manpower Group Solutions en el Museo de Bellas Artes de Bilbo, que ayer vivió una jornada de puertas cerradas. El motivo de esta inusual situación fue el inicio de una huelga indefinida que llevarán a cabo, como «una piña», los 34 auxiliares de sala, taquillas, tienda y área de educación.