ALEMANIA-ITALIA

Lo caprichoso del cuadro competitivo provocará que uno de los dos combinados que mejores prestaciones han ofrecido hasta el momento en el torneo se quede fuera de las semifinales. La actual campeona mundial, Alemania, se encontrará enfrente con el peor rival posible, ese que le tiene comida la moral y que tampoco es manco en cuanto a palmarés, una Italia que quizás no tenga entre sus filas grandes nombres, pero que suma al tradicional rigor defensivo y potencia física una buena salida de balón.

Claro que si de invulnerabilidad se trata, los germanos se llevan la palma. Cero goles son los que ha encajado Neuer en los cuatro partidos disputados hasta ahora por Die Manns- chaft, una trayectoria inmaculada que les permite salir con un favoritismo contenido ante un adversario al que todavía no han conseguido vencer en una fase final, pese a haberse enfrentado hasta en ocho ocasiones.

Y algunas de ellas sangrantes para la memoria futbolística teutona, no así para las vitrinas transalpinas. Como la final del Mundial de 1982 –3-1– con el killer Rossi y la inolvidable celebración de Tardelli, o la eliminación de la anfitriona en la Copa del Mundo de 2006 (0-2), a manos de la escuadra azzurri, a la postre campeona. Engrosan esta estadística favorable a los intereses italianos su agónica victoria (4-3) en la también semifinal del Mundial de México 1970 y, más recientemente, la última Eurocopa (1-2), del mismo modo en el peldaño previo a la disputa de la final.

Algún día deberá acabarse esa racha, pensarán desde el lado teutón, y los de Joachim Löw quieren que sea en Burdeos, donde el técnico de Schönau va a seguir apostando por el buen momento de forma de Draxler y por invertir la estrella de Müller, un goleador nato que todavía no sabe lo que es marcar en una Eurocopa. La única incógnita que flota en el entorno de los actuales campeones mundiales es saber cuál será su rendimiento ante un contrincante de enjundia, después de una fase de grupos y unos octavos bastante plácidos.

Todo lo contrario que una Italia que ya ha dejado muestras inmejorables de su capacidad competitiva, doblegando a dos selecciones que partían como candidatas al triunfo final, Bélgica y España. El trío que forman en el eje de la zaga transalpina los rocosos Barzagli, Bonucci y Chiellini –por ellos no parece pasar el tiempo– supone los cimientos de un bloque que no da tregua al contrario, encimándole y saliendo muy rápido cuando recupera la pelota.

Su mariscal en combate, Antonio Conte, se verá obligado a conformar una medular poco habitual, ante las bajas de los lesionados Candreva y De Rossi –entrenó parte de la sesión–, además del sancionado Thiago Motta. Retrasar la posición de Parolo, así como dar entrada al centrocampista de la Juve Stefano Sturaro, son las soluciones que parecen más lógicas ante las posibles ausencias, un hándicap que habrá que ver hasta qué punto resulta decisivo.

El delantero Nolito llevará el «9» en el Manchester City

Nolito, cuyo fichaje por el Manchester City de Guardiola se oficializó ayer, llevará el número «9» a su espalda en el conjunto inglés. Los citizens han pagado la cláusula del delantero andaluz, que se estableció en 18 millones por el Celta, su último club.

Ben Arfa es el primer fichaje del PSG de la era Emery

El PSG anunció ayer el fichaje de Ben Arfa como primera incorporación en la etapa que iniciará el técnico vasco Unai Emery al frente del todopoderoso equipo parisino. A sus 29 años, Ben Arfa proviene del Niza, un jugador talen- toso, pero también indisciplinado.