Agustín GOIKOETXEA
BILBO

La estación de Garellano estará finalizada para 2018

Las obras de la nueva estación soterrada de Garellano estarán finalizadas para 2018. El proyecto, cuya inversión supera los 22 millones de euros, persigue eliminar los autobuses de la superficie y de Luis Briñas.

El Gobierno Aburto presentó ayer a la tarde al Consejo Asesor de Planeamiento el Plan Especial que da sostén al proyecto de la futura estación soterrada de Garellano, que traerá asociado un edificio de once alturas, con 25.000 metros cudrados de superficie, que acogerán servicios de la terminal de autobuses, así como una zona comercial junto a un gimnasio, además de una residencia de estudiantes y un hotel. La inversión para la construcción de la estación y el parking superará, según el Consistorio bilbaino, los 22 millones de euros, que aportarán las empresas que controlarán la gestión de la infraestructura.

La reunión del Consejo es previa a la aprobación inicial de la nueva ordenación urbanística por parte de la Junta de Gobierno y a que se abra un periodo de información pública. Resueltas las alegaciones, si las hubiese, el Pleno municipal deberá refrendarla. La previsión es que las obras de la estación soterrada y su aparcamiento de 500 plazas, con cuatro plantas bajo rasante, comiencen al inicio de 2017 y finalicen para el primer semestre de 2018.

A partir de entonces, en la parcela que ahora ocupa Termibus se construirá el inmueble que ocupará usos terciarios privados y una plaza de 7.500 metros cuadrados. El proceso de participación para definir el desarrollo de ese espacio público comenzará después del verano, según avanzó ayer el concejal de Obras, Servicios, Rehabilitación Urbana y Espacio Público, Ricardo Barkala. .

El Gobierno municipal estima que la estación será «clave» en el desarrollo y el futuro del barrio, entroncándose con otras actuaciones urbanísticas en el área Basurto-San Mames. El objetivo es reducir las afecciones en superficie de la terminal de autobuses y también de sus accesos por Luis Briñas, que pasará a tener solo tráfico local, ya que los accesos serán por Pérez Galdos y Gurtubay.

«Esto va a significar un antes y un después, sobre todo para la calle Luis Briñas y su entorno», destacó Barkala, que explicó que los accesos peatonales a la plaza serán por Pérez Galdós y Luis Briñas. Además, Peréz Galdós será peatonal en el tramo entre Luis Briñas y Gurtubay.