Joseba VIVANCO
Athletic

Solo miran hacia adelante

Los rojiblancos ya piensan en esa cuarta victoria consecutiva que les catapultaría en la tabla, ante un Sevilla que a lo loco vive bien.

«Esto va por momentos, ahora estamos con nueve puntos, parece que hemos superado un bache pero esto no para, no podemos pararnos para ver el paisaje porque te sacuden otra vez». Las palabras siempre atinadas de Ernesto Valverde tras ganar en un campo donde en sus 18 últimas visitas solo se había impuesto una única vez, ponen de manifiesto que en la confianza de que la tempestad que rodeaba a este inicio de curso esté superada, el Athletic ahora solo tiene ojos para el Sevilla. Una victoria ante el difícil rival andaluz sería como un triple salto desde el trampolín olímpico de diez metros. Si ya de por sí ganar cada jornada en una Liga tan competitiva como la española es complicado, traerse la victoria en dos salidas seguidas tiene un valor incalculable. Y más hacerlo cuando eres sabedor de que tu mejor nivel está por llegar.

Tienen mucho méritos estas tres victorias porque se consiguen en un tránsito hacia esa mejor puesta a punto del equipo de Valverde. Es impensable no sufrir en campos como Riazor o Los Cármenes que tan mal se le suelen dar a los leones. Que el rival apriete y te ponga en apuros entra dentro del juego, y quizá por eso el resultado final adquiera más cotización.

Txingurri y sus hombres tienen ante sí un bonito reto. Sumar una cuarta victoria seguida en Liga, algo que ya firmaron entre febrero y marzo pasado, cuando ganaron a Valencia, Deportivo, Sporting y Betis, para caer después ante el Espanyol. Pero cumplir ese objetivo relanzaría a los rojiblancos hasta la parte más alta de la tabla antes de viajar a Málaga y luego recuperar fuerzas en el parón liguero. «Hace tres días perdíamos 3-0 con el Sassuolo y todo era un desastre, el sábado hay otro partido y nuestra intención es que esto no sea una anécdota y seguir arriba, pero para eso hay que ser regulares», apuntaba Valverde, que quiere aprovechar esta dinámica favorable y exprimirla al máximo. No será sencillo, porque el equipo sevillista de un discípulo bielsista como Jorge Sampaoli les va a hacer correr y dar lo mejor de sí.

Sevilla, de los más rematadores

El club del Nervión, con claroscuros en su juego como el Athletic, se ha aupado no obstante hasta la segunda plaza. Con una mentalidad ofensiva muy próxima a la que vivimos aquí en esos dos años de locura rosarina, es un rival poderoso físicamente y que aprieta mucho al rival –entre los que más faltas comete junto al Athletic–, el equipo más rematador –12 disparos por partido frente a 8 de los bilbainos– tras Madrid y Barcelona, y, ojo, al que menos remates de cabeza le hacen, tan solo uno en las cinco jornadas disputadas. Habrá que ver hasta qué punto funciona el sábado el juego aéreo de los rojiblancos.

Con un día menos de descanso que los andaluces, pero con la vuelta segura de De Marcos y parece que Kepa en la meta, sumar la cuarta victoria es un botín muy preciado como para quedarse mirando el paisaje.