GARA
NUEVA YORK

La ONU se atasca sin dar con soluciones para parar la tragedia de Alepo

El Consejo de Seguridad de la ONU quedó enredado ayer en la búsqueda de soluciones para parar el «baño de sangre» que sufre la ciudad siria de Alepo, tras cerrar una reunión convocada exclusivamente para tratar ese tema.

Estados Unidos reclamó una investigación por «crímenes de guerra» contra el régimen sirio y su aliado ruso, tras un nuevo bombardeo que sufrió un hospital en Alepo, donde el Ejército sirio avanza lentamente y la situación humanitaria es catastrófica.

Rusia a su vez amenazó con usar su derecho de veto para bloquear la propuesta francesa de resolución en la ONU para establecer un alto el fuego en Alepo y prohibir el vuelo de aviones de guerra sobre la atormentada ciudad siria. «No veo de qué manera podríamos dejar que esta resolución sea aprobada», dijo a la prensa el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin.

Rusia, que apoya militarmente la ofensiva del régimen en Alepo, pidió una reunión de urgencia para escuchar el informe del enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, que expresó su preocupación por una posible destrucción total de los barrios rebeldes de aquí a fin de año. De Mistura evocó una pista diplomática a la que Moscú prestó particular atención: que los combatientes yihadistas del Frente Fateh Al Sham (ex Frente Al Nusra, rama siria de Al Qaeda) abandonen el este de Alepo, y que a continuación Rusia declare la suspensión de los bombardeos.

Moscú, que mandó un navío de guerra al Mediterráneo para reforzar su operativo militar, se mostró dispuesto a interceder ante Damasco si los yihadistas abandonan Alepo.