Beñat ZALDUA

La jueza que envió a juicio a Mas instruirá la querella contra Forcadell

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) admitió ayer por la vía rápida la querella presentada por la Fiscalía contra la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, por desobedecer al Constitucional y permitir la votación sobre las bases del proceso constituyente.

La decisión ya estaba tomada como mínimo desde el lunes, pero el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) no consiguió hasta ayer notificar a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, que admite a trámite la querella en su contra presentada por la Fiscalía. En el auto emitido, el TSJC valora «inicialmente como posible la comisión de un delito de desobediencia y eventualmente, de un delito de prevaricación».

Empieza por tanto la instrucción del caso, que correrá a cargo de la magistrada Maria Eugènia Alegret, la misma que instruyó la querella contra el expresident Artur Mas por el 9N. Forcadell puede recurrir la decisión, pero si su petición es desestimada, quedará en manos de Alegret analizar los hechos y escuchar a las partes, tras lo cual deberá decidir si envía a juicio a Forcadell o no. Como precedente, no tuvo reparos en abrir juicio oral contra Mas.

En su auto, el TSJC dio por buenas las razones de la Fiscalía para presentar la querella, en las cuales se centra en recordar que Forcadell permitió que el pleno del Parlament votase las conclusiones de la comisión de estudio del proceso constituyente pese a la doble advertencia enviada previamente desde el Tribunal Constitucional. Así, la Fiscalía acusa a la presidenta de la cámara catalana de desobedecer al TC y actuar a sabiendas de que cometía una ilegalidad (prevaricación), mientras que Forcadell ha defendido en todo momento que se trataba de permitir un debate parlamentario basado en la libertad de expresión.

Doble vara de medir

Forcadell volvió a recibir ayer numerosas muestras de apoyo, empezando por el Govern, cuya portavoz, además de consellera de Presidència, Neus Munté, aprovechó la rueda de prensa posterior al consejo de gobierno para denunciar que «mientras el sistema político catalán puede acabar sentado en el banquillo de los acusados, los implicados en la trama Gürtel, los ERE y Jorge Fernández Díaz quedan impunes; esta es la diferencia entre los dos sistemas».

También mostraron su apoyo los grupos parlamentarios de Junts pel Sí, Catalunya Sí que Es Pot (CSQP) y CUP.