Como se destaca en la ilustración anexa, que ha sido elaborada por Graphic News en base a datos recogidos de varios medios especializados, hace apenas seis años que los teléfonos móviles irrumpieron en el mercado de la publicidad convencional para pelear por un trozo de esa jugosa tarta económica –valorada entonces en 460.500 millones de dólares– con el resto de soportes tradicionales, entre los que ya se había hecho un hueco Internet a través de los ordenadores de mesa.

Según la misma fuente, este ejercicio se cerrará con un gasto global en publicidad de 579.000 millones de dólares (546.000 millones de euros), lo que supone un incremento de cerca del 25% respecto a 2010.

En este corto periodo de tiempo, los móviles han logrado “comerse” un 12,3% del pastel (unos 71.000 millones de dólares), llegando a superar el porcentaje que alcanzan los periódicos como soporte en papel –sin tener en cuenta sus ediciones digitales–. Y se estima que en 2018 llegará al 18,7%.

Abriendo un poco más el foco, en el mismo análisis se resalta que en un par de años Internet –sumando ordenadores y móviles– superará en el ránking del reparto publicitario a la televisión, que aun así seguirá acaparando un tercio del total, mientras que el papel prensa caerá por debajo del 10%.