Amaia U. LASAGABASTER
PRIMERA FEMENINA

Un derbi sin color prolonga la racha del Athletic

Las rojiblancas golearon, con hat-trick de Erika, a un Oiartzun que despide elaño como farolillo rojo. El Athletic se coloca a un punto de la cuarta plaza.

ATHLETIC 4

OIARTZUN 0

 

Las previsiones se cumplieron a rajatabla en Lezama. Athletic y Oiartzun prolongaron sus rachas en un derbi muy desequilibrado, lo que provocan que los dos equipos lleguen al parón navideño con sensaciones opuestas. Sabor agridulce para el Athletic que, superada la pésima racha de lesiones y resultados que le apartó de la pelea por el título, concluye 2016 en plena reacción. Un empate y tres victorias en las cuatro últimas jornadas permite que las rojiblancas se coman las uvas a un punto del cuarto, el Valencia.

Uvas que sabrán más amargas en Oiartzun, con el equipo anclado al fondo de la clasificación, aunque al cuadro guipuzcoano le queda el consuelo de que a la vuelta de vacaciones se encontrará con un calendario más amable que el tramo que se cerró anoche en Lezama –el choque correspondía realmente a la sexta jornada, aplazada en su día por los compromisos del Athletic–, que le ha llevado a convertirse en el único equipo de la categoría, junto al Tacuense, que no conoce la victoria.

Fue clara ayer la del Athletic, que convirtió el partido en un monólogo. El desequilibrio fue escandaloso en el plano estadístico –el primer tiempo se saldó, por ejemplo, con un 90% de posesión para las rojiblancas, o un 12-0 en lanzamientos a puerta– y pudo haberlo sido también en el marcador, con un sinfin de ocasiones para el equipo de Joseba Agirre. Ante un Oiartzun que acumuló jugadoras en su área y prácticamente no se asomó a la de Ainhoa en la primera parte, el cuadro local acumuló llegadas desde el pitido inicial. Pero con tanta gente en tan pocos metros cuadrados, el balón no hacía más que encontrarse obstáculos en su camino a la portería. 45 minutos y dos segundos tuvieron que esperar las rojiblancas para que Erika, la gran protagonista de la tarde, abriera el marcador con un disparo cruzado.

Tras el descanso, a las azules no les quedó otra que estirarse. Y esta vez su anfitrión solo necesitó diez minutos para encontrar un hueco por el que colarse. De nuevo Erika, se coló entre las centrales para sortear la salida de Otxoa y marcar a puerta vacía. La propia Erika e Irune Murua –que incluso pudo marcar el quinto en el descuento, con un balón al larguero– redondearon el marcador ante un Oiartzun que incluso al final se sacudió el miedo y generó un par de ocasiones sin premio.