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BERLIN

Temor al efecto del proteccionismo sobre la sólida economía alemana

La economía alemana presenta un cuadro general sólido y saneado, con rotundos datos macroeconómicos y buenas expectativas de crecimiento para el actual ejercicio. Pero sobre estas perspectivas se cierne la incertidumbre generada por el mensaje proteccionista que llega de EEUU, «el camino más peligroso», según señaló el ministro alemán de economía en su discurso de salida. Subrayó, sin embargo, que el 60% de las exportaciones alemanas van a Europa.

La política proteccionista anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump, así como el anuncio contra el acuerdo comercial que mantiene con la UE han disparado la alerta en las economías europeas. Así lo atestiguan las palabras del responsable hasta ayer de la cartera de Economía del Ejecutivo alemán, Sigmar Gabriel, actual responsable de Exteriores. «El proteccionismo es el camino más peligroso, la orden que da un capitán en un barco que se hunde», señaló en su último discurso como ministro de Economía ante el Bundestag.

En una encendida defensa del libre comercio definió como «muy, muy peligroso» para la economía mundial el proteccionismo defendido por Trump, pero atemperó los efectos sobre el crecimiento alemán al recordar que el 60% de las exportaciones alemanas están dirigidas a Europa y un 10% a Estados Unidos.

«Las relaciones comerciales son requisito para la supervivencia económica y social de nuestro país», afirmó antes de subrayar la importancia de defender las reglas de libre comercio y, en concreto, el CETA, el acuerdo alcanzado con Canadá tras superar las reticencias del Parlamento valón, y ampliamente respondido en la calle.

Robustos datos económicos

Gabriel alertó sobre los efectos negativos del auge del proteccionismo en las buenas previsiones económicas del Ejecutivo alemán para este año.

La previsiones gubernamentales contemplan que el PIB crezca este año un 1,4 %, cinco décimas menos que en 2016, cuando aumentó el 1,9%.

Atribuyen ese menor porcentaje a que este año habrá menos días laborables que el anterior.

El número de personas con trabajo aumentó en 1,5 millones hasta alcanzar los 43,5 millones, y el índice de desempleo registró, con el 6,1%, el nivel más bajo desde la reunificación alemana en 1989. Para 2017 se espera que el índice de paro baje una décima más, hasta el 6%.

Además, desde 2013, cuando comenzó la legislatura, los salarios netos han registrado un aumento promedio del 1,5% anual.

En el informe presentado se destaca que la introducción de un salario mínimo interprofesional ha mejorado los ingresos de cerca de 4 millones de trabajadores.

Sin embargo, advierten de que, pese a la buena situación de la economía, mucha gente se muestra preocupada por su propio futuro y por la situación de la sociedad en general.

La respuesta de la política a esas preocupaciones, según señaló Gabriel, debe ser buscar caminos para aumentar la cohesión social y hacer que la gente participe de los beneficios del crecimiento. Uno de los problemas es que mucha gente, según Gabriel, siente amenazados sus puestos de trabajo por la tecnología y la globalización.

Consideró que el mayor peligro es creer que el buen desempeño de la economía continuará sin necesidad de hacer nada y pidió redoblar los esfuerzos para hacer frente a los cambios tecnológicos, ante los que «no podemos pensar solo en ahorrar. Solo tendremos perspectivas de futuro con un pacto de inversiones amplio y valiente».

Por ello, en el presupuesto de 2017 se contempla un aumento de un tercio en las inversiones, que deberán alcanzar los 36.100 millones de euros.

El Gobierno también espera que haya un aumento moderado de las inversiones privadas, que se pueden ver afectadas por la incertidumbre que existe en el panorama internacional.

«El comercio internacional puede verse frenado por corrientes proteccionistas; eso enturbia las perspectivas de las exportaciones y con ellos la disposición a invertir de las empresas», señala el informe.

«Sí al libre comercio»

Ante ese riesgo, el Eurogrupo abogó por continuar trabajando con el libre comercio y mejorar los estándares europeos en cuestiones sociales.

«Sí al libre comercio», afirmó el titular el presidente del Eurogrupo, el holandés Jeroen Dijsselbloem, en la rueda de prensa celebrada al término de un encuentro en el que varios ministros mostraron su rechazo a las políticas proteccionistas de la nueva Administración estadounidense.

El también titular de Finanzas holandés apuntó que esto también abre la puerta a «oportunidades» para establecer nuevos acuerdos comerciales con otras regiones del mundo. «Precisamente, parece que las relaciones comerciales entre América Latina y Estados Unidos están ahora bajo presión, así que tenemos la posibilidad de llegar a otras regiones desde Europa», señaló Dijsselbloem.

Según el presidente del Eurogrupo, los ministros de Economía y Finanzas de la moneda única creen en «acuerdos comerciales justos y ese es el mensaje» que quieren mandar a Estados Unidos.

Dijsselbloem hizo hincapié en que, por primera vez desde la crisis, está previsto que todos los países vuelvan a crecer, aunque sigue habiendo riesgos internos y externos, como el nuevo Gobierno estadounidense o el Brexit. «Hemos conseguido mucho en los últimos años y hemos dejado la crisis atrás, pero en esta coyuntura es particularmente importante reafirmar nuestro apoyo al libre comercio a nivel global y el refuerzo del mercado único», reiteró.

China, por «un papel estabilizador mundial» junto a Alemania

«China y Alemania deben fortalecer la cooperación a través del comercio y la liberalización de la inversión con el fin de salvaguardar conjuntamente el sistema y el orden internacional existente», trasladó el primer ministro chino, Li Keqioang, a la canciller alemana, Angela Merkel, en una conversación telefónica.

Según la información difundida por el Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Li quiere que China y Alemania desempeñen un papel estabilizador de la economía mundial «en momentos de incertidumbre.

China se convirtió el año pasado por primera vez en el primer socio comercial de Alemania, sobrepasando al tradicional líder en este ránking, Estados Unidos, informó ayer la Cámara Alemana de Industria y Comercio (DIHK). Según sus propias cifras de importaciones y exportaciones, el estado francés se mantuvo en su tradicional segunda posición y Estados Unidos cayó hasta el tercer puesto.

«Con la mejora de la situación económica EEUU podría volver este año al menos a la segunda posición, si no afecta a esta ecuación la política aduanera del nuevo presidente», manifestó el responsable de Economía Exterior de la DIHK, Volker Treier. Estados Unidos sigue siendo no obstante el principal país de destino de las exportaciones alemanas, pese a que el año pasado retrocedieron un 5% en términos interanuales, explicó la DIHK.GARA